Se llamaba Belén el nuevo miembro de la familia 2 - Relatos Eróticos

Se llamaba Belén el nuevo miembro de la familia 2

Belén iba feliz hacia la casa de su novio, se había puesto ropa muy ajustada, acababa de salir del gimnasio, sabía que muchas miradas se clavaban en su cuerpo, la encantaba lucir sus tetas y que sus nalgas lucieran al moverse, quería hablar con su cuñadita, por eso iba antes de la llegada de la madre de Alberto, Llamo al timbre, estaba muy caliente, pero eso no era novedad en ella.

-¿Si?

-Abre Pilar, soy Belén,

En cuanto la miró supo que fue ella la que les vio por la mirilla, sin dejar de apartar sus ojos de ella se acercó muy lentamente hasta ponerla contra la pared, ¡que buena estaba la cabrona!,

Llevaba aun el uniforme de clase, la camisa y la falda, sus tetas y esas caderas no se disimulaban en él, al contrario, se veían más pronunciadas, necesitaba beber de ese joven coñito y lo haría.

Empezó a acariciar su cara suavemente mientras la miraba, quería ponerla nerviosa,

-Dime cariño ¿ayer nos viste?

A todas las preguntas Pilar asentía sin hablar, Belén jugueteaba con los botones de su camisa, acariciaba sus tetas con delicadeza mientras la miraba y preguntaba,

- ¿Te gustó? Seguro que sí, tienes un cuerpo muy bonito, te encanta tocarte desde hace mucho,

-¿Te tocaste cariño?

Ahí belén ya la estaba desabrochando botones, se estaba poniendo aún más caliente al ver la horrible ropa interior de su cuñadita, de colegio de monjas, abrió completamente su camisa, empezó a jugar con el ombligo y la barriguita mientras veía como sus pezones se ...

... marcaban en ese vulgar sujetador.

-Seguro que sí, te encanta mirar ¿verdad?

Pilar asintió,

-Como a tu hermano, le encanta mirar, se pone muy caliente mirando a otros,

-Hoy si te portas bien te dejo mirar ¿vale?

Pilar asintió, no sabía qué decir, estaba disfrutando de esas caricias, estaba cada vez más excitada, se dejaba llevar por los dedos que recorrían su cuerpo, ya se había mojado desde hacía tiempo, Belén ya la había puesto una mano en su joven coño, lo recorría con un dedo sobre la ropa interior, el índice marcaba sus labios al deslizarse sobre sus marcados labios,

-¿Te gusta verdad?

-Sssssiiiiihhhhhh,

-Ponte contra el espejo,

Pilar rápidamente puso sus dos manos en los laterales del espejo de la entrada, abriendo las piernas con rapidez,

-Así me gusta zorrita y obediente,

Belén se agachó detrás, bajó sus feas bragas, abrió esas tremendas nalgas dejando su estrellado agujero desprotegido, lo olió, lo escupió, empezó a chupar el soberbio culo que tenía frente a ella,

- aaaaaaaahhhhh

-Nada de gritos putita,

-calladita, ¡quítate ese sujetador, quiero ver tus tetas al aire!,

Pilar lo hizo, casi rompe el sujetador y la camisa al tirar de ellos,

-¿Ves cómo eres una zorrita?

-Deseas que te toquen y te follen, Te voy a comer el coño, te voy a romper el culazo que tienes,

-¡tócate las tetas y mírate al espejo!, quiero que veas lo zorrita que eres y lo puta que puedes llegar a ser,

Belén empezó a meter la lengua por dentro del ...