1. Desde muy chico me di cuenta de que yo iba yo por el camino equivocado


    Fecha: 21/09/2025, Categorías: Gays Sexo con Maduras Transexuales Autor: bobby0906, Fuente: SexoSinTabues30

    ... salía con un hombre, especialmente mucho mayor que yo, y, en mi primera cita, ya se la estaba chupando. Lo mejor de todo es que yo me sentía en el cielo. Que rico me sabia y que felicidad estar mamando verga por primera vez.
    
    Él dejo que yo me mostrara como la verdadera puta que era y se dispuso a disfrutar de mi rica mamada.
    
    Un poco más tarde, me puso de a perrito y me empezó a chupar el culo. Dios mío, que rico, que delicia, nunca me imaginé que se pudiera sentir tan delicioso una lengua de hombre por detrás. Yo estaba que explotaba de excitación, ese hombre me tenía ya de lo más caliente. Mi mente ya no funcionaba, ahora era mi culo el que llevaba la iniciativa. Me empecé a mover como puta y en el momento que me mete toda la lengua en mi hoyo, no lo pude evitar y me puse una venida súper tremenda.
    
    Guauuu, eso fue fabuloso. Jamás me imagine lo que se podía sentir con una lengua lamiéndote el culo. Me tumbe todo desmadejado sobre la cama boca abajo.
    
    Entonces, mi amigo se recostó casi sobre mí y me empezó a ensalivar el culo metiéndome los dedos por detrás, yo suspiraba y gemía de placer y hasta meneaba las nalgas como buena puta, dándole a entender lo mucho que me gustaba lo que me estaba haciendo.
    
    Cuando el hombre considero que yo ya estaba listo, se montó sobre mí y colocando la punta de la verga en mi hoyito, me la empezó a meter poco a poco.
    
    Se sentía algo de lo más extraño, un hombre mayor encima de mi metiéndome la verga por el culo, jamás me imagine ...
    ... que eso podría llegarme a ocurrir. Pero ahora estaba ahí, con las nalgas desnudas, el culo parado y el hombre recostado sobre mi dándome verga. Increíble.
    
    Al principio sí que me dolió bastante, le pedía que me la sacara, el dolor era insoportable. El hombre la sacaba y con los dedos me lubricaba con una crema especial, según me dijo, era para reducir el dolor, pero luego supe que también era para calentarte y te dejaras.
    
    En verdad la crema se sentía muy rico, estaba bastante fresca y aliviaba lo caliente del culo y el dolor. Así que al poco, yo ya me dejaba que el hombre me cogiera a su gusto.
    
    Llego el momento en que ya me había metido toditita su enorme verga y entonces sí que yo chillaba, pero de placer, un placer totalmente desconocido, pero que me hacía sentir una real hembra sometida por su macho y, la verdad, me encantaba sentirme así.
    
    Ese jueguito como que ya me empezaba a gustar. Luego de un buen rato de estarme cogiendo y metiéndome la verga hasta el fondo con movimientos de lo más deliciosos, yo ya en verdad lo estaba disfrutando al máximo y le movía las nalgas como puta, haciendo que me la metiera más y más. En verdad ahora sí que me sentía en la gloria.
    
    El hombre me estuvo cogiendo durante bastante tiempo, me hizo como marioneta, colocándome en muchas posiciones diferentes. A mí todo aquello me encantaba de verdad, pero para mí, lo mejor era que me cogiera de a perrito, eso sí que me causaba tremendo placer.
    
    Finalmente, el hombre se vino tremendo ...