1. Paseando al perro


    Fecha: 08/02/2019, Categorías: Incesto Autor: warron76, Fuente: CuentoRelatos

    Una amiga tuvo que salir de viaje súbitamente y no se le ocurrió otra cosa que dejarme su perrazo, un pastor alemán precioso que responde al nombre de Roko, con el perro trajo medio remolque de parafernalia, que si camita, que si saco de comida, juguetitos... e instrucciones. Iban a ser tres días, pero parecía que se mudaba para siempre.
    
    En fin, cayendo la tarde, cogí pelotita, bolsas, correa y me dispuse a salir con Roko a dar una vuelta por el rio Guadalmedina.
    
    Roko corría alegre por el río y se jugaba con otros canes por allí, hasta que se acercó a un perrillo mediano y se lo empezó a follar.
    
    Me acerqué apresuradamente y vi que hacía lo mismo el dueño del otro perro.
    
    Le pregunté, oye te molesta que... ()
    
    y me respondió riendo "por mi como si se casan, total, preñado no se va a quedar mi perro ", no pude menos que unirme a su risa, para presentarme a continuación. "Soy Dani" "Yo Kiko " seguidamente me ofreció un cigarro que acepté, al ir a encenderlo se me cayó la correa, momento que aprovechó su perro para llevársela corriendo. Roko se puso a jugar con él y la correa... Resultado: correa hecha jirones.
    
    Kiko se disculpó, improvisó una correa con unas bolsas de plástico y me dijo: "vamos a mi casa que tengo allí una correa".
    
    Ya era de noche, se me había pasado el tiempo volando pero no tenía nada que hacer, así que acepté acompañar a aquel hombre de mi edad (unos 40) a su casa.
    
    Estaba muy cerca, Kiko vivía a un lado del río y yo al otro. Nada más ...
    ... entrar se quitó la camiseta me dio una lata de cerveza y me dijo, siéntate en el sofá, espera un momentín, y reapareció con un pantaloncillo de deporte en vez de las bermudas que llevaba antes. Se puso a buscar en una estantería frente a mi, se ponía de pie, se agachaba y yo, la verdad, no podía dejar de mirar su espalda, con un par de tatuajes muy chulos, y su culazo. Se volvió con la correa que buscaba y me pilló. Le dije que miraba los tatus y me enseñó los que tenía delante. Había uno que desde el ombligo bajaba a meterse en el pantaloncillo. Uff, el de pie y yo sentado nos miramos a los ojos y de repente se escuchó un ladridillo lastimero. Roko estaba de nuevo follándose al perrillo.
    
    "Vaya un perro cañero eh, jejeje, no para ¿les imitamos?"
    
    Le volví a mirar a los ojos y le baje el pantaloncillo como respuesta.
    
    Frente a mi tenía un bonito rabo, no muy largo, pero bastante gordo. Sin más preámbulos lo engullí, y empezó a ganar firmeza y a crecer en mi boca. Kiko lo sacó de mi boca, y me golpeó con la polla la lengua, la boca, las mejillas, y volvió a metérmela, para follarme la boca. Me quitó la camiseta y me pellizcaba los pezones con mucho arte, y una de sus manos empezó a buscar mi culo.
    
    Tío no te vayas a correr en mi boca!! Le dije en un momento que recuperé la lucidez.
    
    Él me sonrió, me puso de pie y aflojó mi cinturón, los pantalones cayeron, los aparté a patadas y me besó, un beso que no esperaba, entre dulce y guarro.
    
    Me dejé llevar mientras nuestras ...
«12»