1. Paseando al perro


    Fecha: 08/02/2019, Categorías: Incesto Autor: warron76, Fuente: CuentoRelatos

    ... lenguas danzaban como llamas de una hoguera, sus manos me sobaban el culo, entraban y salían de mis calzoncillos... me giré y puse el culo, con calzoncillos y todo sobre su cipote enhiesto. Hizo amago de cogerme de la polla, que empalmada, seguía dentro de mis gayumbos, pero se la aparte y la dirigí a mis tetas mientras seguía dándole culazos sobre la polla.
    
    Me bajé un poco el calzoncillo por detrás, y goloso noté como su rabazo se frotaba en mi culo, especialmente contra mi ano, que estaba siendo lubricado con saliva que acercaba con una mano.
    
    Me separé y agachándome me volví a meter en la boca su pollón, cada vez más duro, brillante y rico. Me paró, "quieto q me corro", y mientras se cogía el rabo apretando, me iba colocando a 4 patas sobre las rodillas en el sofá. Hábilmente se puso un condón y enfiló mi ano con su ariete. Mentiría si dijera que me dolió. El me la mete, sí, pero yo muevo el culo también para metérmela. Levanto una pierna para que me folle más duro, pero noto que está frenando. Giro mi cabeza y busco su beso de nuevo. Acelera, me ...
    ... embiste fuerte, y de repente, para.
    
    Me quedo frío, el me coge de la picha, me da un besito y me lleva a su cama. Me tumba de espaldas, abre mis piernas y me pasa la lengua por el pene, besa el glande y me la chupa. Me gusta pero yo lo que quiero es que me folle! se lo digo entre suspiros y con media sonrisa se levanta y me vuelve a penetrar. El de pie y yo tumbado. Me masturba mientras me folla despacito. Cruzo las piernas tras su culo y le empujo hacia mi. Cara a cara. Kiko está sudando de lo lindo, le vuelvo a besar y sus pollazos aceleran, fuerte contra mi culo. Suspiro y jadeo. Vuelve a salirse de mi, se quita el condón y de nuevo se aprieta el glande con el puño.
    
    Pero ya no hay vuelta atrás, le doy unas chupadas rápidas a mi nuevo amigo mientras me masturbo furiosamente. Me saco de la boca su herramienta y lo pajeo. Córrete en mi pecho, le suplico. Dicho y hecho, dos trallazos de leche van a parar a mi pecho peludo y otro se estampa en mi mejilla, mientras yo me derramo en el suelo.
    
    Nos besamos y sonreímos.
    
    Estoy pensando en adoptar un perro, jeje. 
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