1. La primera vez que Follé con un perro y mi hermana


    Fecha: 27/09/2025, Categorías: Zoofilia Autor: bhorio, Fuente: TodoRelatos

    A la mañana siguiente mi hermana vino a recoger a Tarzán.
    
    -Espero que se haya portado bien. Está acostumbrado a verte todos los días. Os lo dejé a vosotros porque os conoce bien.
    
    -Se ha portado muy bien, Ana. Nos hemos entretenido mucho con él. Es un perro estupendo.
    
    -Bueno, Laura, tengo que llegar a casa pronto. Tengo que deshacer el equipaje y mañana he de madrugar.
    
    -De eso nada. Tenemos que hablar, hermanita.
    
    Mi hermana y yo nos llevamos menos de dos años y siempre hemos estado muy unidas. Compartimos habitación más de veinte años. Yo era la mayor y fui quien le enseñó para qué servía esa rajita además de para hacer pis. Siempre nos hemos contado nuestros líos. Ella sí sabía qué pasó en el congreso del 92 y, aunque no somos lesbianas, las dos conocemos el sabor del coño de la otra.
    
    -Mira, Ana, ayer me pasó algo muy curioso con tu perro y creo que hay algo más.
    
    Le conté la historia de la piscina, sin omitir que mi marido lo vio todo. Ella estaba atónita. No me interrumpió.
    
    -Y además el muy cerdo por la noche me propuso que follara con el perro y la puta de tu hermana se lo folló. Lo curioso es que el animal lo hacía todo con una naturalidad sorprendente. ¿Tienes algo que contarme tú?
    
    -Laura, espero no haberte metido en un problema. Sí, esperaba que en un par de días Tarzán se estuviera quieto, pero si te vio desnuda y haciéndote una paja es inevitable que entendiera que querías sexo. Yo llevo tres años utilizándolo para eso. Decidí comprarlo ...
    ... cuando me divorcié, por la compañía, pero el cachorro en un par de años era ya adulto y era un verdadero suplicio ir con él al parque ¡Quería montar a todo lo que se le pusiera delante, perra o perro!
    
    Un día en casa lo pillé lamiéndose la polla, la tenía ya casi toda fuera, grande y dura. Yo llevaba por lo menos un mes sin levantarme un plan y notaba el coño mojado. Empecé a acariciármelo por encima de las bragas mientras seguía mirando a Tarzán. Comenzó a eyacular y yo no lo pude evitar, me desnudé, me senté en el sofá frente a él y me puse a pajearme. En un momento que cerré los ojos noté el primer lametón. Fue como tú misma me has contado, pensé que si Tarzán quería colaborar ¡Pues bueno!
    
    Fue un orgasmo intenso y extraño, pero no fue el último. Desde entonces siempre que me desnudaba delante de él acudía a lamerme, las piernas, el culo, el chocho… y cuando me apetecía, me sentaba, abría las piernas y dejaba que me comiera el coño hasta correrme. La verdad es que yo tardé más que tú en sentir pena por él. Fueron por lo menos dos meses hasta que le cogí la polla y otro mes o así hasta que se la mamé. Enseñarlo a follar me llevó cerca de un año, pero ahora es un profesional. Tienes el orgasmo asegurado.
    
    - ¡Ya sospechaba yo que los perros no nacen enseñados!
    
    Tarzán apareció e inmediatamente se puso a saltar sobre mi hermana, a lamer sus piernas y sus manos.
    
    -Está a la vista que te echaba de menos. Anda, llévatelo a casa y daos una alegría, aunque no sé si le queda ...
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