1. Katherine, la mocosa enfadosa de la oficina


    Fecha: 31/10/2025, Categorías: Dominación / BDSM Fetichismo Autor: Gatito664, Fuente: SexoSinTabues30

    ... mi lengua mientras, con las manos, tocaba sus pequeños pechos para disfrutar más. Solo podía sentir cómo sus manos apretaban mi cabeza y con sus dedos jalaba mi cabello. Empecé a lamer y chupar su clítoris de forma brusca y despiadada, para luego volver a recoger con mi lengua todos los juguitos que salían de su vagina, sonando igual que un perro sediento tomando agua.
    
    De pronto salí de mi trance y entonces pude escuchar su voz que antes sonaba tan lejana.
    
    —Aaaah aaaaah… Oooooh siiiiiiiiiiiiiiiii Sssssss mmmmmmmmh, así, así… Sigue… Aaaahhhh.
    
    No solo lo estaba disfrutando. Estaba vuelta loca con lo que le estaba haciendo.
    
    Empecé a hacerlo más rápido y más fuerte. Y de un momento a otro, sus gemidos, que de por sí eran fuertes, se volvieron más intensos y agudos.
    
    —Aaaah aaaaah siiiiiiiiii, no pares, no pares, no pares, no pares, mmmmmhhhhgggg.
    
    Katherine apretó mi cabeza con sus piernas, tensó todos sus músculos y arqueó la espalda, poniendo sus ojos en blanco y perdiendo completamente el aliento mientras me llenaba la boca con un squirt delicioso que bebí hasta la última gota.
    
    Ella se quedó teniendo espasmos y respirando de manera agitada mientras yo aún seguía metido entre su falda con su vagina en mi boca, lamiendo suavemente, disfrutando del sabor de Katherine.
    
    Pude ver que sus piernas temblaban suavemente cuando me apartó y se bajó de mi escritorio. Me dio un beso apasionado en la boca, que aún tenía embarrado el sabor de su deliciosa ...
    ... conchita.
    
    —Hiciste un muy buen trabajo, tengo que compensártelo.
    
    Y diciendo eso, cayó de rodillas frente a mí, desabrochando mi cinturón y mi pantalón, el cual atrapaba una erección dura como la piedra.
    
    Al bajar mi pantalón, mi miembro saltó ante ella, quien, admirándolo por un segundo, lo tomó con una mano y comenzó a masturbarlo mientras con la otra empezó a masajear mis testículos de una forma tan delicada que me hizo sentir en las nubes.
    
    Cerré mis ojos y solo disfruté de esas suaves manos que recorrían cada centímetro de mi verga, cuando, sin previo aviso, se introdujo mi miembro en la boca hasta topar con su garganta, lo que me hizo volver a la realidad y disfrutar de esa presión que se siente al fondo de una garganta profunda.
    
    —Ohhhh siiiii —exclamé cegado de placer—, sigue, por favor, no te detengas mmmh.
    
    Ella solo continuó, metiendo y sacando mi miembro de su garganta, apenas pudiendo respirar, haciendo ese ruido tan hermoso al ahogarse que para el hombre representa el máximo placer.
    
    —Gggghh ggghhh ggghhh —sonaba cada vez que ella movía la cabeza hacia arriba y hacia abajo.
    
    Sacó mi verga de su garganta y respiró profundo.
    
    —Aaaah —exclamó para después toser con sus ojos llenos de lágrimas por el ahogamiento.
    
    No perdió un segundo más y se lanzó a lamer y chupar mis testículos mientras con una mano me masturbaba rápidamente.
    
    Lamía y masajeaba mi escroto de una forma tan ruda y a la vez delicada, nunca había recibido una mejor mamada.
    
    Su mano empezó a ...