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Ayudando a Isabel con sus sesiones 2
Fecha: 16/11/2025, Categorías: Dominación / BDSM Autor: sumisso1978, Fuente: TodoRelatos
... oleada de excitación, y su cuerpo tembló bajo el peso de las emociones contradictorias. María se acercó por detrás, sus manos deslizándose sobre los hombros de Roberto. "¿Ves lo que has llegado a ser, Roberto?" susurró en su oído. "Eres mío, completamente mío. Y cada sesión, te llevaré más lejos, te haré sentir cosas que nunca imaginaste. Te humillaré como nunca has imaginado" Roberto cerró los ojos, sintiendo la verdad de sus palabras. Sabía que María tenía el control, y que su tratamiento estaba avanzando. La humillación, el placer, el dolor... todo se mezclaba en una experiencia que lo estaba transformando. Isabel, observando desde su rincón, sonrió con satisfacción y una excitación extraña en su entrepierna. La sesión había sido un éxito, y María estaba demostrando ser una dominatrix hábil y decidida. Roberto, a pesar de su resistencia inicial, estaba ayudando, su sumisión creciendo con cada nuevo desafío. María besó el cuello de Roberto, sus labios suaves contra su piel. "Hasta la próxima sesión, Roberto," susurró. "Y recuerda, cada día que pase con el plug ...
... puesto, pensarás en mí y en lo que te hice sentir hoy." Roberto asintió, su cuerpo aún tembloroso, su mente llena de pensamientos confusos. Sabía que la próxima sesión sería aún más intensa, y que María no se detendría hasta que él aceptara completamente su dominación. Con una última mirada, María se alejó, dejando a Roberto solo con sus pensamientos y la sensación del plug en su interior. Isabel se levantó, acercándose a él con una sonrisa cómplice. "Has hecho un buen trabajo hoy, Roberto," dijo, su voz llena de aprobación. "María está orgullosa de ti." Roberto sonrió débilmente, sintiendo una mezcla de vergüenza y orgullo. Sabía que su viaje estaba lejos de terminar, y que las próximas sesiones serían aún más desafiantes. Pero también sabía que, de alguna manera, estaba disfrutando del proceso, de la transformación que María estaba provocando en él. Y mientras se miraba en el espejo, con el plug aún en su lugar, Roberto no pudo evitar preguntarse qué más le depararía el futuro. La respuesta, sabía, estaba en manos de María, y él estaba listo para descubrirlo.