1. La pequeña de vestido azul 2


    Fecha: 22/11/2025, Categorías: Hetero Sexo con Maduras Autor: Sandox, Fuente: SexoSinTabues30

    Desde aquel día todo mi pensamiento fue para la pequeña Melody, que así se llamaba la pequeña, aunque sus visitas a la casa fueron más esporádicas, yo trataba de verla, aunque sea de lejitos, cada vez que la veía mi corazón se aceleraba y por las noches no podía evitar que colme mis pensamientos en su forma más pura. La actitud de la pequeña Melody hacia mi cambió un poco, me miraba pícaramente como preguntándome cuando sería la próxima vez, con tanta gente alrededor era difícil intentar hacer algo, no había muchas oportunidades para estar solos.
    
    Un día cada uno fueron a realizar sus trabajos, a mí me encargaron cortar unas maderas muy especiales que solamente se encontraba en los terrenos del vecino Felipe, como él y su mujer generalmente están en sus sembríos tenía la oportunidad de encontrar a los niños solos, cuando fui pasé por la casa pero no había nadie, escuché voces en el riachuelo, a la altura de su casa, más arriba de la nuestra, así que me dirigí allí, efectivamente las niñas estaban allí pero también estaba con ellas Nancy, una amiguita mayor que ellas y todas bañándose en ropa interior, todavía no usaban sostén, Nancy al percatarse de mi presencia se cubrió los senos con las manos y pudorosa se agachó en la poza de agua, me saludaron y las saludé, pregunté a Melody por sus padres y como suponía me dijo que habían salido al campo a trabajar y no volverían hasta el mediodía.
    
    Sin muchas esperanzas me dirigí a mi trabajo, me había alejado como treinta metros ...
    ... y cada vez que miraba a la pequeña Melody siempre me estaba mirando, me puse en una posición que ella sola podía verme, la hice una seña indicándole donde estaría, esperé un momento, lo suficiente para que Melody disimuladamente se alejara de sus amigas, cuando la vi se había puesto el mismo vestido azul de la primera vez y venía en dirección donde yo me encontraba, mi corazón empezó a bombear aceleradamente y mi pene empezó a reaccionar, cuando llegó al lugar donde yo estaba, un poco cubiertos por los arbustos, la cogí de la mano y rápidamente nos encaminamos dentro del bosque al lugar donde debía cortar los troncos, ninguno de nosotros hablaba nada, solamente nuestra respiración agitada y el rumor del follaje movido por el viento.
    
    Llegamos a un lugar libre donde había un tronco tirado en el suelo de unos 70 cm. de altura, había bastante luz, incluso rayos del sol, con todo el deseo del mundo aprecié con lujuria sus labios carnosos, sus cabellos castaños, sus ojos grises, la besé tiernamente en los labios, la levanté por la cintura y ha hice sentar encima del tronco, antes puse una manta que había llevado conmigo. Le pregunté si quería hacerlo nuevamente y feliz asintió con la cabeza, entonces la hice abrir las piernas y noté que llevaba un calzoncito celeste con borlas, suavemente aparte con la mano a un lado y palpé despacito su rajita que ya estaba húmeda, ella me miraba divertida y como diciendo !adelante! , !qué esperas!, suavemente bajé su calzoncito hasta sacarla ...
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