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El bar de la perversión V.
Fecha: 27/11/2025, Categorías: Fantasías Eróticas Sexo en Grupo Autor: GordMadrid, Fuente: SexoSinTabues30
... entrada de Carlota. Cerraba sus ojos mientras cerraba la boca en torno a ese agujero sin abrir. Se escuchaba como aspiraba por la nariz para oler los restos del orgasmo y como se deleitaba con el jugo del placer de su compañera. Fabián, como niño listísimo, sabía que con una putita inconsciente no hay prisa ni debe haberla. Sus movimientos eran lentos y se recreaba en recorrer cada milímetro de la vaginita virgen de esa niña que había descubierto los orgasmos hacía unos minutos. Sus amigos le miraban mientras se sentaban en alguna mesa o se ponían más cómodos. La teoría había acabado y tocaba relajarse y disfrutar. El pequeño niño parecía desaparecer en la entrepierna Carlota, mucho más grande que él en todos los aspectos. Tres años a esas edades es un mundo. sin embargo tenía todo bajo control el pequeño. Su mano había subido al clítoris para probar en carne propia la demostración de Fermín. Mientras le apretaba el pequeño botón su lengua ejercía presión sobre su vaginita. La lengua tan pequeña del crío no encontró muchas dificultades en colar su punta dentro de la niña. Fabián gemía mientras empezaba a retirar y volver a introducir su lengua. Inconscientemente su cadera empezó a moverse como si se follara al aire. Se estaba impacientando el crío. Sus amigos se habían acercado para ver el juego de lengua del pequeño del grupo. -Pero Fabián no va a llegar a follársela, la mesa es muy alta. Los gemelos rieron y corrieron a la vez a coger una silla, acercándola a las piernas ...
... de la chica drogada. Esteban y Ángel, los mayores del grupo, sin pedir perdón ni permiso, levantaron a Fabián dejándolo en el aire mientras los gemelos ponían la silla en posición y sus amigos dejaban al pequeño encima de la silla, de pie. El crio se tomó un momento para admirar su premio. Delante suya, a la altura de sus rodillas, yacía Carlota inconsciente y tranquila, como si nada hubiera pasado. Solo los restos de sudor podían advertir de que algo había pasado al que le mirara la cara, pero si se miraban sus atributos de mujer cualquier veía claramente lo que había pasado. Sus pezones seguían duros y erectos. Parecía que no volverían a ser los mismos después de semejante viaje. El niño bajó la mirada y ahí estaba el coño de su amiga, al filo de la mesa. Sus pelos contrastaban con el minúsculo coñito de Sandra, pero sus turgentes labios y su clítoris, su tamaño, la sensación de que podría perderse dentro de él le gustaba mucho más que el de la hermana de su amigo y maestro. Se arrodillo en la silla y miró a sus amigos sonriente. Estaban rodeando a la chica, sin perderse nada de la situación, frotando sus pollas en el cuerpo inconsciente de la retrasada o masturbándose lentamente. Podía ver poco desde mi posición pero su pequeña polla apenas se veía al lado de ese coño casi de mujer. -Vamos, campeón, desvirga a esa puta. Le animó Fermín, que estaba sentado en una silla cercana, desnudo, gozándose una paja viendo el espectáculo. Fabián junto su cadera con la de Carlota y ...