Una alumna aventajada: Mi alumna me viola - Relatos Eróticos

Una alumna aventajada: Mi alumna me viola

... estar siendo violada. ¡Uf!

- ¡No! Por favor, ¡no! No me comas el coño, que no me gusta. No se te ocurra lamerme el clítoris mientras metes un par de dedos en mi vagina, sería terrible. - Le decía yo sobreactuando descaradamente, con la clara intención de que hiciera lo que le pedía que no llevara cabo.

Ella hizo lo que le pedí que no y me dio mucho placer. Mi coño soltaba más líquido del que podía generar y me acabé desmayando justo durante un orgasmo. Cuando me desperté descubrí que Susana había aprovechado para desatarme de la silla y moverme ella sola (imagino). Las dos estábamos completamente desnudas. Yo estaba tumbada en el suelo del pasillo entre mesas, con cada extremidad atada a una mesa. Susana tijereteaba conmigo. Yo me moría de placer, pero también de miedo. Había dado carta blanca a un monstruo.

- ¿No crees que deberías irte a casa? Tus padres te estarán esperando para comer. - Le dije al ver que el reloj de la pared marcaba ya las tres menos cuarto.

- En todo caso mis hermanos, mis padres no llegan a casa hasta las seis. Pero a mis hermanos les dará igual, son unos trastos y prefieren que yo no los esté controlando.

¿Y ella? ¿No se consideraba a ella misma un trasto? Hablaba de ella misma como alguien formal a la vez que me violaba... Bendita falsa percepción de la realidad, porque realmente era un ángel. Si se hubiese dado cuenta de que la lujuria la había llevado a hacer aquella barbaridad hubiese parado en el acto, estoy segura. Menos mal que ...

... no se dio cuenta y su coño siguió frotando el mío. Alcancé sus tetitas con mis manos y las manoseé. Ella me copió y bajó las suyas para masajear mis tetas. Me corrí por culpa de su contoneo cadencioso en mi coño y de su sonrisa.

- ¿No crees que ya es suficiente? Ya has abusado de mí.

- ¿No te gusta?

- No es que no me guste, es que me quiero ir a mi casa. Tengo cosas que hacer.

- ¿Qué hay mejor que follarme? ¿De verdad hay algo más importante que quitarle la inocencia a una chica?

- Susana, yo no te he quitado la inocencia. Te la has quitado tú sola. Y no te estoy follando, tú me estás violando.

- Es lo mismo con otras palabras.

Ella seguía moviéndose encima de mi coño. No paró hasta correrse. Realmente me gustó. Al acabar se tumbó sobre mí. Instintivamente intenté llevar mi mano a su cabeza para acariciarle el pelo, pero me fue imposible por tener las dos manos atadas a las patas de las mesas.

- Tengo la duda de si es tu primera vez. - Le dije.

- Claro. Llevo enamorada de ti desde que nos conocemos. Nunca se me hubiese ocurrido follar... perdón, violar a otra chica antes que a ti.

- Mmm... Gracias. Supongo. Pero lo haces como si fueses una experta. Creo que nunca he estado con una chica que lo haga con tanta desenvoltura como tú.

- Pues no sé, será de practicar con la almohada. Y de lo mucho que me pones.

Nos quedamos un ratito en silencio.

- ¿Me puedo ir ya? - Le insistí.

- Sólo si me prometes que lo volveremos a hacer.

- Vale. - ...