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Glory days
Fecha: 12/12/2025, Categorías: Infidelidad Autor: Eric Salazar, Fuente: TodoRelatos
... de agradecimiento el empotrador del este. - Gracias, ha sido la mejor polla que me ha follado. Me has llenado entera, ahora que hemos terminado ya puedes salir. Yo observaba todo desde un rincón mientras me masturbaba lentamente para no correrme. La verdad es que estaba impresionado de cómo mi mujer había manejado esa polla. Cuando la polla de Mark salió de su interior se veía el condón a rebosar de semen. Le había sacado la leche bien sacada. Se quitó el preservativo y lo arrojó a la basura. - Gracias por todo pareja. Ha sido un placer. Si algún día queréis repetir, suelo venir bastante por aquí. Hasta la vista. — Se despidió y salió por la puerta. María se sentó en el sillón exhausta y mirándome me dijo: - Vamos para casa para que se me vaya cerrando el coño, que así no me puedes follar porque no voy a sentir tu polla. Me ha dejado la vagina muy dilatada. Me la noto enorme. - Lo que tú quieras morena. Subimos las escaleras y a mi mujer le costaba cerrar las piernas, andaba un poco raro. A llegar a la planta superior, en la que estaba la tienda, mi mujer se acercó al expositor donde estaban los diodos realísticos y llamando al vendedor le pidió uno de veinticinco centímetros por seis de diámetro, este lo envolvió en papel de regalo y lo metió en una bolsa. Compramos también un bote de gel lubricante dilatador y pagando todo salimos a la calle. - Me gusta la sensación de tener el coño así de abierto. Y a partir de ahora serás tú quien me lo abra ...
... con esto. — Dijo levantando la bolsa, refiriéndose al enorme dildo que habíamos comprado. —A no ser que me vuelvas a dar otra carta blanca. - Algún día disfrutarás de otro día así. Pero creo que tú tb te has ganado unos buenos cuernos. Así que ve pensando que fantasía quieres que cumpla y qué día eliges para darme una carta blanca a mí también. Llegué a casa y María estaba en la cocina haciendo la cena. Me puse detrás de ella y le dije al oído: - Este sábado ponte guapa que te voy a llevar a que te comas una polla en un glory hole. - Mmmmmm. ¿Quieres verlo, ehhh? - Me preguntó con una sonrisa de medio lado en la boca. - Por supuesto. No me lo perdería por nada. Será al medio día. Te invito a un vermut y después te podrás tomar un dulce de leche, si te apetece. - Si eso es lo que quieres, eso haré. Esa noche, cuando nos acostamos para dormir, mi mujer apagó la luz y volvió a hacerme una mamada que no olvidaré en la vida. Fuerte e intensa como nunca antes, pero esta vez, cuando estaba a punto de correrme, saco mi polla de su boca y masturbándome con fuerza, hizo que me corriera encima de sus tetas, que quedaron llenas de mi semen. Se metió mi polla en su boca de nuevo hasta acabar con la última gotita que salía, dejándola bien limpia. Cuando acabó conmigo encendió la luz, y poniéndose delante de mí empezó a extenderse mi semen mientras masajeaba sus pechos y se pellizcaba sus duros pezones, que brillaban al humedecerlos. - ¿Así es como quieres que acabe ...