Una misteriosa, insólita y sorprendente familiaIII - Relatos Eróticos

Una misteriosa, insólita y sorprendente familiaIII

Una misteriosa, insólita y sorprendente familia III

Capítulo 3. – sábado día 27 de junio de 2.026

Violeta, le elfa mayor.

Faltaban unos minutos para las dos de la tarde del sábado día 27 de junio, cuando Violeta salía de la ciudad de Salamanca con todas sus pertenencias, ya que no volvería de nuevo a la residencia donde había estado los dos últimos años ni tampoco a la universidad donde había cursado los dos primeros años de la carrera de medicina, y decidida a complacer a su madre había tramitado terminar la carrera en la Universidad de Granada, y aquella misma mañana había terminado felizmente el ultimo de todos los tramites, darse de baja en la residencia de estudiantes donde había residido esos últimos años, ya que a partir de septiembre debería de incorporarse en su nueva Universidad, y viviría junto a sus hermanos pequeños en la casa de sus abuelos maternos.

Dadas sus extraordinarias notas, no había tenido ningún problema en traspasar su expediente académico de una universidad a la otra, por lo que el día anterior había dejado solucionado todo el papeleo burocrático. No solo había tomado la decisión por las presiones de su madre Susana, que habían sido muchas las últimas semanas, también había otros motivos personales que la habían animado a hacerlo, y en el momento que enfilo la autovía A66, en dirección a León en su flamante Audi A1 que le regalo su padre cuando aprobó el primer curso, rememoro lo sucedido desde la última vez que estuvo en su casa, que ...

... había sido por las navidades pasadas, por lo que ya hacia seis meses que no veía a su familia.

En esa última visita al hogar donde había crecido, una coqueta vivienda de dos plantas casi en el centro del pueblo y muy cercana a la farmacia propiedad de su padre, se había sentido algo desplazada, por un lado, no percibió la despreocupada intimidad que siempre había observado entre sus progenitores, a los que vio algo distantes e incluso en algún momento incomodos o ansiosos. No obstante si había disfrutado compartiendo con sus dos hermanos su tiempo, mucho más que en otras ocasiones, incluso más que cuando vivía junto a ellos antes de irse a la universidad, pues durante las horas en que sus padres estaban en la farmacia, ellos fueron los primeros en que de alguna manera la habían animado a tomar ahora la decisión de trasladarse a vivir con sus abuelos, sus tías y sus primas, y por supuesto con sus hermanos mellizos, Belén y Julio, pues fue durante esas fechas cuando la confesaron que su madre les había propuesto que fuesen a estudiar a la tierra que los vio nacer, y así poder vivir en la casa de los abuelos, cuando empezasen la universidad, cosa que estaban sopesando y que comprobó que no les parecía nada mal esa idea a ninguno de ellos, principalmente a Belén que se juntaría con sus tres alocadas primas. Quizás ese tiempo que antes no había compartido con sus hermanos y que las ultimas Navidades si lo hizo, fue porque no estaba en el pueblo su amiga del alma, Daniela, que ...