Cambio de parejas
Fecha: 15/08/2017,
Categorías:
Intercambios
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Mimujer tenia una amiga casada, con tres hijos, su matrimonio era perfecto, se querían y habían forjado un futuro, sin saber que la amistad con mi esposa iva a cambiar su destino, mi mujer era una ninfómana empedernida. Estubimos tres años casados, todo parecia ir bien, ahunque sexualmente conmigo no era muy ardiente, pero yo era pasivo en el sexo, no precisaba mucho.
Todo empezó cuando mi mujer dijo que podríamos salir junto a bailar y tomar algunas copas, nuetra amistad se fué consolidando, comiamos muchas veces en su casa, cenábamos a menudo, y cuando sus hijos se iban a dormir, nos quedábamos hasta altas horas de la noche hablando y esplicándonos cosas íntimas de nuestras vidas.
Esta intimidad se fue extendiéndo y nuestra tertúlia cada vez era mas atrevida, salieron a relucir cosas sobre sexo y comportamiento sexual mas atrevido, hasta que llegó lo que protagoniza mi historia.
Una noche, despues de cenar, nos sentamos juntos en el sofá, con el vino y las bebidas que siguieron estábamos muy animados, y como no, la conversación recayo en la sexualidad. Aquella noche, tenian a sus hijos en casa de los abuelos, por lo que estábamos solos. Empezamos a hablar de que nos parecía el intercambio de parejas, del sexo en comunidad, del amor libre de perjuicios, y terminamos estando de acuerdo en practicar sexo entre nosotros.
Miguel, el marido de Anna, nuestros amigos, puso su mano sobre la pierna de mi mujer, ella coqueteando le dijo. β vigila, que tu mano en mi ...
... pierna me pone muy caliente β A lo que él respondió β Eso es lo que pretendo, si tu marido esta conforme β me dijo mirándome intencionadamente.
Miré a Anna,
- ¿Tu estas conforme en que tu marido meta mano a mi mujer ?
- Siempre que él no nos lo prohiba a nosotros, a mi tambien me gustaria hacerlo contigo.
Acercó su cara a la mia y me besó en la boca, de soslayo, vi que Miguel subía su mano por la pierna de Miriam, mi mujer, hasta llegar a la entrepierna, empezando a acariciarla a traves del pantalón, Miriam abrió las piernas, ofreciéndole el contacto a traves de la tela, mientras, ví como su mano se posaba sobre el bulto que a Miguel se le formaba bajo la bragueta.
La mano de Anna, sin mas palabras, manipulo la cremallera de mi pantalón, buscando el miembro, que ya empezaba a estar hinchado,
Un momento,- exclamo Miguel, - que os parece si nos ponemos cómodos β yo pienso que estaremos mejor si nos desnudamos.
- Si, - dijo Miriam β Tengo ganas de ver tu pene en acción, el de mi marido ya lo tengo muy visto- dijo riendo.- Seguro que me gustará.
- Sera mas excitante que nos desnudemos mutuamente.
Anna, me hizo ponerme de pié, yo me desabroche los botones de la camisa, mientras ella bajaba mis pantalones y calzoncillos a la vez, agachándose hasta mi verga, que ahora ya completamente erecta, dió un salto al ser liberada, Anna se quedó arrodillada a mis pies, su boca a la altura del miembro.
- Que maravilla β esclamó β Miriam, tu marido esta muy bien ...