1. El incesto en mi vida (Parte 15)


    Fecha: 22/02/2019, Categorías: Confesiones Autor: juangm78, Fuente: CuentoRelatos

    ... que ya no volviéramos a estar juntos, pero me calme cuando me dijo “que tonto eres, sabes que si, lo que pasa es que no hay manera de poder estar contigo y ahora que tengo novio pues la cosa es peor aun para vernos”, mi cabeza empezó a dar vueltas intentando ver de dónde sacaba un hueco, en el que Sandra y yo pudiéramos encontrarnos a solas, pero no había manera, la verdad es que era muy complicado.
    
    De repente la escuche “¿sabes que echo de menos tu polla?” aquella pregunta me puso cachondisimo, le pregunte que si su novio no la follaba como yo, ella me dijo que al principio era como los otros con los que había estado, pero que poco a poco, le había enseñado a follarla como yo, pero que aun así su polla era más pequeña y delgada que la mía. Íbamos subiendo la temperatura, ella me pidió hacerme una pregunta muy íntima y le dije que cual era, “¿Cuándo follas con mi tía, piensas en mi?”, aquello me descuadro bastante y no sabía que contestarle, acabe diciéndole que si, cosa que me había pasado alguna vez, ella se rio y me dijo que ella también pensaba algunas veces en mi, mientras follaba con su novio.
    
    Le dije de acabar ahí la conversación porque me estaba poniendo muy cachondo y me la iba a tener que menear, ella se rio y me confesó que ella también estaba muy húmeda, me pidió si podía enseñarle mi polla, le dije que no, porque sus padre podían volver, ella insistió diciéndome que si llegaban, escucharía el portón de la cochera y que tendríamos tiempo de apagar las ...
    ... cámaras. Cogí el portátil y lo puse en la mesita de noche, mirando hacia la cama, me desnude completamente y me tumbe, mi polla estaba grande pero no del todo, mirándola dijo “ufff como echo de menos esa polla dentro de mí”, sin pedírselo, se bajo la cremallera de la chaqueta del chándal, mi polla se puso dura del todo, al ver que no llevaba nada debajo, sus tetas aparecían en la pantalla, a la misma vez que me decía que le gustaría ver cómo me la meneaba.
    
    Aquello no era nuevo para mí, ya que había tenido cibersexo con bastantes mujeres, cogí mi polla y empecé a pajearme muy lentamente. Mientras me la tocaba, le pregunte a ella si no tenía ganas de tocarse también, me respondió que sí y la invite a que se tocara a la vez que yo. Hecho hacia atrás la silla en la que se encontraba sentada, se bajó el pantalón y se lo saco solo de una pierna, por si sus padres llegaban y tenía que vestirse rápido, abrió sus piernas y pude ver su coño, perfectamente depilado, ella empezó a pasar su mano por la raja, no tardemos en coger el ritmo ambos con nuestras pajas, escuchar sus gemidos hacían que mi polla estuviera a punto de soltar la leche, para no correrme iba ralentizando mi paja, mientras veía como ella se introducía sus dedos dentro de aquel coño tan apetecible, unos minutos después sus gemidos aumentaron y se corrió delante del ordenador, yo me corrí apenas unos segundos después, cayendo toda la corrida encima de mí, ya que me encontraba tumbado, ella no se perdió ni un solo momento de ...
«1234...»