Patas arriba (XVII) - Relatos Eróticos

Patas arriba (XVII)

... volvieron duras como la piedra, mientras sus ojos tímidos brillaban de odio al comprender lo que sucedía, empezó a gritar, nos llamó traidores y nos dijo hasta de lo que íbamos a morir, en ese momento lo sujetaron varios enfermeros a las órdenes de un médico que imaginé era el director del lugar y que había estado hablando con Javi, le recibió la carpeta que le tendía y nos dijo que él asumiría la responsabilidad desde ese momento, en parte me alivió, porque la aparición de Carlos fue bastante dura, especialmente por la transformación que vi en el chico, fue algo así como ver a Hulk ponerse verde. Después de un café cargado y palabras tranquilizadoras de Paco, Teresa, Javi e Ylian me sentí mejor y hasta contento de lo que en su momento me pareció una tontería por parte de mi amigo, al menos no volveré solo y hay refrescos de sobra. También sé que vino porque si se quedaba en casa ni entre Iván y Ricardo juntos le detendrían para irse al hospital a estar junto a su Joel, así que no se lo agradeceré, se está salvando el pellejo a sí mismo también, aunque sí que le di un buen abrazo al dejarle en su casa.

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Mira tú por dónde, yo que vengo a ver a mi primo al psiquiátrico y me encuentro con que ingresan al Edu, parece que por fin descubrieron que tanta ternura con tanto dinero sólo puede ser síntoma de locura extrema. En fin, creo que encontré la víctima número dos de mi lista, porque no es casualidad que Ylian y Ramón estén aquí, creo yo.

Ester

Ayer tuvieron que ...

... ingresar al pobre Edu, cuando por fin podíamos encontrar una forma de ayudarle entre todos, la ventaja es que como está fuera de Madrid mejor iré a verle, así dejo de pensar en lo que pasó con la cabrona de Aurora, cuando Tavo esté seguro de lo que le pasa y me autorice cantarle las cuatro, se va a enterar.

Claro, yo no tengo coche ni sé conducir, así que me tocó venir en tren, y como buena chica despistada, no pregunté antes de venir y no me dejaron verle, aunque “accidentalmente” mencioné que estudio medicina y me dejaron ver al médico que lo examinó al llegar y también vi al psiquiatra a cargo, me confirmaron lo que Javi y Tavo ya nos habían dicho, además me indicaron el tratamiento médico que seguirá y me dejaron verlo en su habitación, aunque él no supo que yo estaba allí. Me alegró ver que lo tratan bien, Paco y Teresa supieron escoger un sitio donde lo tratan como una persona con dignidad y derechos, eso siempre es bueno. Al final me volví sin ver a mi amigo, pero con la garantía que lo tratarían bien y además me informaron que los findes podríamos visitarlo siempre y cuando no hubiera ningún impedimento médico para ello, que probablemente nunca pasaría, por fin una buena noticia. Además pasé el día lejos de mis problemas y al llegar al hospital, a tiempo de una visita rápida, Tavo me dijo que repitió la prueba dos veces más y en las dos dio negativo, por tanto mi chica lo que tiene es un problema de hormonas más que un embarazo. Creo que debo disculparme con ella, ...