1. ¡Patricia!


    Fecha: 11/03/2019, Categorías: Infidelidad Autor: claudiob, Fuente: CuentoRelatos

    ... los huevos cuando iba a ella.
    
    Yo restregaba mi cara contra su concha, la cual estaba totalmente depilada, igual que la mía, y mordisqueaba suavemente su gran clítoris.
    
    Parecíamos una maquina perfectamente aceitada pues en ningún momento quedaba libre uno de mis agujeros, pues cuando la verga de Mario abandonaba mi concha, para ir a mi culo, la lengua de mi madre ocupaba ese lugar, y cuando la poronga de mi hermano dejaba mi orto para ir a mi concha, los dedos de mi madre hurgaban ese sitio, mientras tanto mi boca estaba ocupada con el clítoris de mi madre o mi lengua se introducía, dura en su vagina buscando tocar todos sus laterales.
    
    No fue mucho el tiempo ¿O sí? La verdad es que perdí la noción del tiempo, hasta que llegue.
    
    Fue un orgasmo en cadena, primero llegue yo, que inundé la cara de mi madre, me siguió Mario pues sentí no solo su grito sino las descargas de su semen en mi recto y luego el grito ahogado, por la pija de Mario a la que estaba sacándole las ultima gotas de leche, de mi madre quien pareció que me estaba orinando en la cara.
    
    Ahí Mario salió de arriba nuestro y yo de arriba de mi madre, la que dándose vuelta y acostándose ente nosotros dijo “Que hermosos hijos tengo, No solo me llenan de orgullo por lo bueno y estudiosos que son, sino que además me hacen gozar de la sexualidad como no la disfrute ni de joven”
    
    Luego nos dijo:
    
    —Vamos a bañarnos y a cambiarnos así lo recibimos bien a papá.
    
    —Sí preparémosle una rica cena - ...
    ... Dije.
    
    —Ya tengo pensada cual será la cena – Me dijo.
    
    Y sin agregar nada más se levantó y se fue al baño.
    
    Con Mario nos levantamos, y como buenos hijo fuimos tras ella
    
    Cuando entramos en el baño ella ya estaba en la ducha, de espaldas, mostrando su hermoso culo.
    
    No pude dejar de sentir envidia por él, porque el mío, por más ejercicio que hago, no crece.
    
    A Mario lo llevaba agarrado de la pija, y noté como esta volvía a tener vida ante semejante espectáCULO, por lo que sin decir nada, me arrodille y se lo empecé a chupar para ponérselo duro.
    
    Mamá, dándose cuenta que estábamos en el baño, giró la cabeza y viendo como le chupaba la verga a Mario dijo “Sí, ponérsela dura que mi culo la quiere”.
    
    Cuando la verga de Mario estaba bien dura, deje de mamársela y la lleve hasta el culo de mamá. Esta, al sentir la punta de la verga de Mario en la entrada de su culo, se dobló haciéndole más fácil la entrada.
    
    Ahí me arrodille y chupándole las bolas a Mario y la concha a mi mamá vi como esa verga, que hacía poco había llenado mi culo de leche ahora estaba satisfaciendo al orto de nuestra madre, la que no solo movía circularmente su gran culo, sino que también acariciaba sus pechos y su vagina.
    
    Yo no solo chupaba las bolas y el pedazo de verga que salía del culo de mi madre, sino también su vagina y los laterales de su ano sino que además me masturbada con unas mano, la concha, y con la otra sacaba parte de la leche que Mario había dejado en el interior de mi ...