La puta y el tonto - Relatos Eróticos

La puta y el tonto

Este relato podría ir perfectamente en no con sentido aunque podría ir en varias categorías lo he colocado en bisexual. 

Con treinta años estaba tonteando con una tía sobre cuarenta y cinco estaba muy rica buen culazo buenas tetas y desde luego un tanto descarada. 

Ella a su vez también lo hacía con otros tíos, concretamente con tres tipos que parecían mayores que ella cosa que ahí aparecía no importarle. 

Pensaba que no tenía mucho que hacer ya que los tíos la invitaban a beber. 

Me aparte un poco porque parecía que aquellos se la iban a llevar, hasta que ella volvió a acercarse a mí. 

Fue entonces cuando los tipos también lo hicieron, me llamo Jordi este es Francisco y Alberto. 

Tanto Francisco como Alberto medían alrededor del 1,80 y Jordi algo más siendo más corpulento que estos los otros dos compresión normal. 

Me invitaron a tomar un trago para comentarme que aquella tipa era mi novia o una buscona. 

Le dije que lo primero no y que lo otro no lo sabía ya que le estaba metiendo fichas y parecía que en cierta medida se dejaba hacer. 

Esto está a mí me dijeron lo mismo que parecía fácil llevársela a la cama pero que al ver que se había arrimado otra vez a mí tenían dudas si fuese mi novia. 

Ahora tonteaba con los cuatro y nosotros algo parecido aunque Jordi parecía ser el más atrevido y podía ver como no se cortaba demasiado metiéndole mano y haciendo comentarios sobre ella. 

Llegó a meterle la mano por debajo de la falda para decir que ...

... lo tenía bien mojadito y esto creo que nos puso a todos más que cachondos. 

En una de estas ella la mujer que se llamaba Fátima me comentó que se estaban poniendo pesados aquellos tipos. 

Yo le sugerí que tomase distancia, para que ella me contestase algo que sí que me dejó un poco atónito. 

No le molestaba que se pusiesen pesados simplemente quería saber si yo les acompañaría ya que los tipos la habían propuesto una pequeña orgía. 

La verdad que estaba más que cachondo pero de ahí a irme con tres tíos y aquella que no conocía me parecía algo surrealista. 

La tía se puso más caramelosa conmigo llegando ahora ya a pegar los buenos morreos mientras los tipos más o menos seguían acosandola. 

Fue Jordi el que me comentó que si no me animaba a ir con ellos y ser protagonista de una orgía, tragos drogas y demás que corrían a su cuenta. 

Les comenté que el tema de las drogas no lo tocaba y que lo de los tragos no estaba mal. 

Salimos del local y ya fuera de él, se comportaron algo mejor era coger el coche e ir a la casa de uno de ellos que se encontraba a las afueras. 

En el coche yo monté delante tanto Jordi como Alberto fueron la parte trasera con ella las bragas enseguida las tuvo quitadas ya que me las dieron a mí.

La metían mano los dos y alternándose la besaban sus pechos estaban fuera ya de aquel top y subjetador había desaparecido prácticamente estaba desnuda en el coche y estos no paraban de tocarla al punto de que no tardó en tener un orgasmo ...