El casero y el padre de mi amiga. - Relatos Eróticos

El casero y el padre de mi amiga.

Mi venganza me hizo ser la amante.
Mi nombre es Verónica Alejandra, voy a compartir dos historias en una.
La primera es cuando perdí mi virginidad y la segunda es cuando tome venganza de una amiga que se metió con mi novio.
Mi madre y yo vivimos solas, en la punta de un cerro, mi padre se separó de mi madre y nos dejó solas.
Mi madre trabaja en una oficina de 9 a 6, pero para irse a trabajar tiene que irse a las 5 am.
El señor que nos renta la casa se llama Eduardo. Es un señor medio gordito.
Un sábado llegó a cobrar la renta, mi madre no estaba, pero me había dejado el dinero para pagarla. Le dije que entrara y se sentará le ofrecí agua, me dijo que si, le servi un vaso.
Fui a buscar el dinero y entregarselo, me pidió más agua, tontamente le mojé su camisa, el me dijo que no había problema, le dije si quiere quitesela y la ponemos a secar.
Acto seguido se quitó la camisa y me la dio.
La puse a secar en el tendedero.
Regrese con el y vi que estaba bien peludo del pecho y le salían pelos de su pantalón.
El notó mi curiosidad y me dijo que si no había visto un hombre desnudo.
Le dije que no.
Me dijo si quieres ver mi verga te la muestro, pero esto quedaría entre nosotros dos, sería nuestro secreto.
Asentí con la cabeza.
Me dijo acércate y desabrocha mi pantalón.
Se paró y desabroche su cinturón y después el botón de su pantalón, de inmediato se bajó el pantalón junto con su calzoncillo, pude ver su verga medio erecta y me dijo si quieres tocarla y ...

... procedió a tomar mis manos y guiarlas sobre su verga.
Después se sentó en el sillón y me dijo que lo masturbara. Primero me enseñó,  el se masturbo y después me dijo: es tú turno.
Yo solita lo andaba masturbando. Y lo masturbe por un rato, su verga quedó bien erecta.
Me tomó mi barbilla y me plantó un beso.
Me dijo vamos a tu cuarto.
El término de quitarse los zapatos y dejar el pantalón y su calzoncillo en la sala, ya estaba completamente desnudo.
Lo tomé de la mano y lo guíe a mi habitación.
Llegamos y cerré la habitación, tal vez por costumbre, ya que eran las diez de la mañana y era poco probable que mi madre viniera o tuviera visitas inesperadas.
Me quitó la camisa, después miró el brasier que traía. Y me lo quito, Estaba bien desarrollada. Miro mis senos
Me mamo un seno, después el otro, me fue bajando los shorts que traía hasta aventarlos y miro mi vagina peluda.
 Me dijo recuestate, y abre tu piernas que vas a sentirte en la gloria, me empezó a lamber la vagina, fue el mejor sexo oral que me han dado. Mejor dicho el primero. Me hizo venir.
Acto seguido se subió sobre mí, tomó su vergota y la guió en la entrada de mi vagina haciendo con su mano movimientos de arriba y abajo con su pene.
Le iba a decir que era virgen, pero de una embestida me lo metió hasta el fondo por la lubricación del sexo oral no me dolió mucho.
Y le dijera que era mi primera vez, que me dolía un poquito y que parara, me la metió más y me dijo al oído.
Que suerte tengo de haberte ...