Doña Chabela la Sra. del Aseo - Relatos Eróticos

Doña Chabela la Sra. del Aseo

... me gusta gorda pero no larga.
Yo me acomodé contra la pared y con una mano la comencé a tomar de la cabeza como guiándola con el movimiento, era un instante increíblemente erótico, sentía que no duraría mucho pues cada vez sentía más placer.
-Me da sus mecos joven?, mmm sii..,
Esa palabra fue mágica, sentí tanto morbo que ya no pude aguantar y traté de meterla más en su boca tanto que pensé que se iba a ahogar la Doña para después venirme muy rico. Me puse parado con la punta de los pies, tratando de dejar mi verga lo más larga posible para alcanzar el máximo placer y viendo como doña Chabela aguantaba la venida de mi miembro en su boca y recibía toda la leche.
-Rico, rico… mmm deme todo, lechita rica
Me miraba a los ojos.
Fue un momento tan cachondo que solo pensé en disfrutarlo, me senté en la cama y junto a mi doña chabela que aun tenia la boca llena de leche mía.
-Hijoles joven si que estaba cargadito he,( dijo entre risa y cara de asombro) muy ricos, yo tengo ya varios meses que solo me quedo con las ganas, porque con el dedo pues no es lo mismo, necesito un pito.
Hablaba asi mientras que sentada junto a mi seguía manoseando mi verga ya media flácida y reducida por la tremenda mamada, mientras yo la observaba detenidamente.
-Caray doña Chabe pues que ganas de satisfacerla, pero mire mi pito, se vino y usted se quedo con ganas. - fue lo que dije mientras ella me observaba con unos ojos de calentura, sus mejillas, aunque era morenita se le notaba mas encendidas ...

... y los labios parecía que se le habían hinchado. Ya no era doña Chabe, era una hembra en celo con ganas de más-.
-Usted cree que no se le pueda parar joven, - dijo mientras me comía con los ojos y con una mano seguía su masturbación de mi miembro y con la otra se metía mano por abajo de su falda y tocando su sexo y comenzo a quitarse los calzoncitos negros que tenía bajo su falda.
Yo me recosté en la cama y vi como mi verga comenzaba a crecer y crecer y mi pensamiento era de tocar a Doña Chabe en donde pudiera, sobre su blusa toqué sus enormes senos y ella ya se había quitado los calzones y junto con las sandalias habían quedado en el piso. La Doña de nuevo me comenzó a dar unas mamadas de verga deliciosa y con una mano se comenzó a quitar la blusa y el sostén para después dejar al aire sus enormes pechos tal y como me los había imaginado. El pezón con el área muy oscura y la tetita ya bien parada.
-Ya ve que, si se pudo parar Joven, si ya esta bien rica de nuevo, mmm, que guevotes tiene, que cabezona la tiene- decía eso mientras seguía mamada tras mamada- Que delicioso pito, se lo va a comer mi pucha, ¿me da chanza joven? ¿Verdad que sí? Esta vieja quiere reata de este macho.
Con una mano arrodillada en la cama, comenzó a abrirse la vagina peludita con los dedos y se metía un dedo y lo sacaba bien mojado.
-Mire como esta de mojada mi pucha, aaah, que rico voy a coger.
Mientras seguía diciendo palabras bien mormosas que me tenia en una calentura insoportable
-Aaah, ya ...