Mis sobrinos calientes - Relatos Eróticos

Mis sobrinos calientes

... inferior de su vagina, usando mi pulgar y mi índice de la mano derecha, separé sus labios vaginales exteriores un poco para descubrir el clítoris, mi dedo índice jugo con el clítoris, moviéndolo en forma circular, mientras decía, como si dictara una cátedra, este es el clítoris, mi sobrino acerco la cabeza poniéndola al costado de la mia, para ver bien, y luego yo suavemente para que él no perdiera detalle, fui corriendo la piel que cubre el clítoris y salio la cabecita rosadita y brillante, y mi anterior apreciación era cierta , mi sobrina tenia un clítoris especialmente grande, una vez que estuvo expuesto le pase la lengua, y ella dio un brinco del gusto, exclamando ahhhhhh, empecé a pasarle la lengua mientras mantenía su clítoris descubierto con mis dedos índice y pulgar, y ella saltaba empujando las caderas luego de un rato, atrape el clítoris entre mis labios y empecé a succionarlo, todo esto era observado de cerca por Arturito, y Vanessa agarro mi cabeza y la empezó a empujar contra su conchita, estaba descontrolada, y gritaba, entonces vi que Arturito de un salto se puso a su costado y le metió su verga en la boca, que ella empezó a chupar con desesperación, y de esta forma también se mitigaron un pocos los sonidos que ella emitía.

Después de un rato soltó la verga de su hermano y empezó a temblar rápido mientras gemía, para al final quedarse completamente relajada, yo pare de chuparla, y me incorpore, vi a mi sobrino que parecía que también había llegado por que ...

... se encontraba desparramado al costado de ella.

Me incorpore y mire hacia mi verga que estaba al máximo, si bien es cierto no me había venido, si me habían salido varias gotas que habían traspasado el short que llevaba puesto, haciendo una mancha oscura.

Me eche a un costado para tratar de calmarme, cuando Vanessa se recupero me quedo mirando, y noto la mancha, y el bulto de mi short, que si bien es cierto había empezado a descender un poco, todavía estaba mas que semirrecto.

Entonces ella hizo un comentario, no es justo que mientras Arturito y yo estamos completamente desnudos, tú todavía estés vestido.

Entonces Arturito reacciono, y me dijo si, tío sácate todo y enséñanos tu verga, hagamos una pelea de vergas, dijo mientras reía, yo les sonreí, pero no hice nada por desnudarme, entonces Vanessa se me abalanzo encima gritándole a su hermano para que la ayude a desnudarme, entre los dos empezaron a revolcarse conmigo en la cama, Vanessa me levanto la camiseta, y mi sobrino me bajo el boxer, y exclamo, que tal vergaza, cuando mi verga salio balanceándose a medio pararse, ya la cabeza empezaba a asomar entre el prepucio, decidí quedarme tumbado boca arriba y dejarlos hacer, y disfrutar de ese momento.

Arturito dijo, mira como sigue creciendo, ya sale la cabeza, y agarrándomela con una mano, le dio un jalon hacia abajo haciendo que toda la cabeza quede descubierta, y al sentir su mano tocando mi verga, hizo que me parara al máximo, el siguió jugando y volvió a jalar ...