DIANA LA SULTANA
Fecha: 19/05/2019,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: epifaniogut, Fuente: RelatosEróticos
... paquete cerrado y al abrirlo, abrió los ojos sorprendido como nunca, era un arnés strap on y un falo realmente mucho más grande que el que él había probado en su anatomía.
Con la ayuda de su paje-marido, se coloco Diana el arnés luciendo el enorme falo en su pelvis. El cuadro era glorioso, esa hermosa mujer, convertida en una excelsa domina, en tan solo dos encuentros (el primero fue solo con Carlos), se paseaba ampulosamente por el gran salón contemplando a sus sirvientes. Ya con la tetera cargada con el semen de sus tres hombres en una mano,con la otra comenzó a sacar lentamente el enorme plug rojo que se resistía a salir del abierto culo de Martin. Cuando hubo terminado de salir, pudo ver lo dilatado que había quedado su orificio, y sentía nuevamente una enorme excitación, sus jugos mojaban sus labios vaginales y le caían por las piernas.
El expuesto Martin, atado al caballete escucho sorprendido:Te voy a lubricar cariño…¡, y Diana comenzó a verte en el interior de su dilatado recto, el contenido de la tetera de cerámica, extraído de sus tres sumisos. El joven sintió correr en su interior el viscoso líquido al tiempo que noto que algo mucho más grande que el plug rojo, se abría paso lentamente.En escasos segundos tenia inserto el enorme falo hasta su base. Martin bufaba y no podía creer lo que estaba viviendo y gozando, sin saber que Carlos era un testigo silencioso de esa tremenda sodomizacion. Diana disfrutaba cada empujón con su gran pene artificial como si fuera ...
... una guerrera victoriosa, su excitación era casi descontrolada y comenzó a penetrar con más ritmo, el abundante semen derramaba por los contornos del ano.
Como estas cariño?Pregunto dulcemente a Martin.No puedo más Diana me gusta mucho, que rico..¡Quiero acabar por favor…¡
Diana extendió la mano para tocar su solitario y abultado miembro con la intención de mastúrbalo y apenas lo toco le dijo suavemente al oído:Dame tu leche esclavo.
La respuesta fue sorpresiva y casi inmediata, Carlos se derramo profusamente en el piso, en el medio de unos alaridos impresionantes.
Placer y dolor….Pensó para sus adentros el sorprendido Carlos, testigo privilegiado.
Luego de un descanso, y ya recompuestos Diana junto a sus tres súbditos –sin vendas ni plugs anales- dialogaban entretenidamente de otras experiencias sexuales tendidos en la inmensa cama, cuando la bella doctora los sorprendió diciendo:Bueno mis pajes, quiero una última alegría.
Ohh no. ¡La cola no…¡ Dijo Carlos y Walter abrió los ojos asombrado, ya que nada sabia del castigo-premio aplicado a Martin en esa misma noche.
Jajaja, la carcajada de Diana fue acompañada por sus seguidores sin saber qué cosas pediría la insaciable fémina.
Quiero sus bocas en mis tres orificios, me he ganado el último polvito. Walter y Martin, los quiero a los dos acostados boca arriba y tocándose la cabeza como si fueran una sola línea, ordeno Diana.
Cumplido su deseo, Diana se ubico parada sobre ellos,con los pies abiertos y al ...