Una noche en la disco (JULIA)
Fecha: 26/05/2019,
Categorías:
Intercambios
Autor: nosoycompasivo, Fuente: SexoSinTabues
... acabaríamos la noche juntos y acertamos; venga, vamos, yo también estoy loco por follaros a los dos y tener una experiencia única, ¡es la primera vez que tenemos un trío con una mujer! Juan se levanto también, se metió la polla dentro y se acerco a Julio, le besó en la boca, luego me besó a mí y dijo: —Vamos, chicos, ¡subamos a la habitación y tengamos una noche que nunca olvidemos! Sé que después de esta noche no te volveremos a ver, y deseo que tengamos todos tantos orgasmos que acabemos derrengados. Salimos del reservado, llegamos a recepción y Juan pidió la llave de la habitación. Entramos en el ascensor y nada más cerrarse las puertas me agarré a sus paquetes y empecé a acariciarlos con lujuria -Veréis, papitos, os aseguro que antes de llegar al 20º piso os habéis corrido - Ellos se dejaron llevar, y continué - Os voy a contar lo que quiero que me hagáis: quiero que me comáis toda entera, uno por delante y el otro por detrás. Uno me chupará el coño y el otro el culo. - Conforme subíamos iba aumentando el ritmo de las caricias, y ellos se tensaron como palos de escoba - Después de comerme toda, deseo que hagáis un 69 y os comáis las pollas mientras yo os miro. Les bajé las cremalleras y metí mis manos agarrando su miembros erectos, y los empecé a masturbar lentamente; sólo íbamos por la planta 10ª cuando Juan soltó un grito y se corrió sobre mi mano, la saque de su pantalón y me acerqué a la boca la mano llena de lefa, chupé cada uno de mis dedos hasta dejar mi mano ...
... limpia. Al verme así Manuel también se corrió y repetí la misma operación. Les subí la cremallera y llegamos a nuestra planta. — ¿Veis? Os lo dije, os correríais antes de llegar a nuestra planta. Ahora llevadme a la habitación y comencemos el juego de verdad. Manuel introdujo la tarjeta y se abrió la habitación. —Pasa, zorra mía, que eres más puta que las gallinas, y tus dos gallos desean picotearte hasta dejarte sin cresta. Conforme lo oía hablar, mis bragas se mojaban cada vez más, nunca me hablaron de esa manera y me gustaba, —Sí, soy vuestra zorra y quiero que me reventéis, me sodomicéis y que no dejéis ni un solo centímetro de mi cuerpo sin ser satisfecho. - respondí. Juan cerró la puerta, me dio la vuelta metiéndome la mano bajo la falda y comenzó a sobarme el coño, mientras Manuel se ponía detrás de él susurrándole al oído. —Vamos, cariño, fóllale el coño con esa mano tan privilegiada. Te puedo asegurar, Julia, que esa mano es mágica, a mi me vuelve loco cuando agarra mi polla y me masturba, es una sensación única. ¡sigue cabrón, mátala a caricias, que todo su ser sea como un gran coño que solo pida placer, orgasmos y pollas! Mientras hablaba, desabrochó el pantalón de Manuel, lo dejó caer y le bajó los calzoncillos para enseguida ponerse de rodillas y empezar a lamerle el culo. Manuel, al sentir la lengua en su ano, me apretó el clítoris y metió un dedo en mi coño y me hizo gemir. Juan agarro la polla de Manuel y comenzó a masturbarlo de nuevo, yo me quede asombrada al ver ...