Mi primera vez con el novio de mi mamá
Fecha: 03/06/2019,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... garganta. -¿Qué, por qué quieres saber eso?, -porque mi novio no la tiene tan grande y quiero saber si tú la tienes más grande-, le respondí. -¿Cuánto te mide?- le pregunté, mis pezones empezaban a ponerse erectos y se veía en el rostro de Ramiro que él lo estaba notando, le costaba trabajo mantener contacto visual. -18 y medio centímetros-, me dijo, creo que con la intención de terminar ahí la conversación, pero eso solo despertó aún más mi curiosidad, y mi excitación, pues a mi novio le mide un poco menos de 15. -¿Me la enseñas?- le pregunté, creo que él no se esperaba que yo fuera a ser tan desafiante, abrió bastante los ojos y me dijo –Claro que no, eres solo una niña, además si tú mamá se entera de que estuvimos hablando de esto me mata-, -pues ese es el punto, que mi mamá no se va a enterar de nada-, le respondí; se quedó callado un momento. –No, si quieres verga tendrás que buscar en otro lado-, me dijo titubeante-. –Pero tú tienes una muy buena y al alcance de mi mano-, le dije mientras estiraba mi mano hasta su rodilla, empecé a acariciar su pierna derecha, él no se quitó. –No creo que esto sea una buena idea-, me dijo tragando saliva, solo necesitaba un empujón más. Me levanté la blusita que traía, enseñándole mis firmes tetas, -¿seguro que no?-, le pregunté-, hizo un gesto como cuando pierdes una pelea y se abalanzó sobre mí, empezó a darme un profundo beso, su lengua buscaba la mía con deseo, y yo le respondía con la misma fuerza. Se volvió a sentar en la silla ...
... del comedor donde estábamos sentados mientras me jalaba hacia él, retiró completamente mi blusa y empezó a devorar mis tetas. Sé lo mucho que los hombres las admiran, me encanta tentarlos con ellas. El muy cabrón sabía lo que hacía, me estaba dando mucho placer cómo manoseaba mis tetas, chupaba mis pezones deliciosamente. –No sabes cuántas veces me he masturbado pensando en estas tetas-, me dijo jadeando, tallando su cara en medio de mis tetas. Levanté su cara por el mentón y le di otro beso intenso, -pues tu pene me ha pasado por la mente algunas veces, y por fin lo voy a probar-, le dije, lo tomé de la mano hasta la sala y lo senté en el sofá, tomé una de las ligas que traía en la muñeca como pulsera y me hice una cola de caballo, mientras él se puso de pié para quitarse la ropa, quedando solo en boxers y calcetines. Así de pie como estaba le bajé el bóxer, descubriendo ese delicioso pene que estaba a punto de hacerme gozar. Quizás era porque la de mi novio es más corta y delgada, pero la verga de Ramiro se veía muy grande, a pesar de que aún no estaba del todo erecta. Ramiro sonrió con mi cara de sorpresa al ver su gran pene, se volvió a sentar en el sofá y empezó a acariciar su virilidad, de arriba abajo. -¿Te gusta?- me dijo con una gran sonrisa en su boca, -me encanta-, le dije también sonriendo, moviendo la cabeza de arriba abajo al ritmo en que estaba masajeando su verga. -¿Y qué piensas hacer con ella?- preguntó, lo cual me provocó a ponerme de rodillas frente a él. ...