Conociendo mi otra mitad - Relatos Eróticos

Conociendo mi otra mitad

Una vez que una persona llega a los 30 años se replantea muchas cosas, sobre la vida en general, sueños, ambiciones, trabajo…pero sobre todo se replantea sobre su situación sentimental.

Al llegar a los 30, sin pareja, sin hijos, sin alguien que me acompañe, comencé a plantearme que es lo que realmente quería para mi vida, como lo quería y que tipo de persona sería afín a mi personalidad y deseos. La idea de una vida feliz, llena de amor, cariño y diversión me gustaba mucho, pero el tener un lado sexual tan activo, caliente y deseoso, lo hacía interesante. Por mi vida habían pasado muchas personas, alguna buenas, otras mejor aprehender que volver a verlas, otras con una química tan especial que la ropa interior se moja de solo pensarlo, los pezones se erectaron y la respiración se agita como el movimiento permanente de mus caderas al sentir un pene tan delicioso dentro de mi…bueno luego de replantearme todo eso, decidí buscar en línea a alguien que pueda estar a la altura de mis exigencias, no solo personales, sino también de mis deseos más lujurioso y calientes dentro de mí.

Pasado un tiempo desde que hice un perfil en página, comencé a recibir solicitudes y mensajes de muchas personas, interesantemente de ambos sexo. Pero mi búsqueda estaba más que clara. Pasado unos meses conocí a una persona bastante interesante, su perfil era muy similar al mío, nos gustaban las mismas cosas, intereses en común, etc. Todo parecía bien, aunque era una persona muy sincera, tierna y ...

... atenta, no veía señales de química entre nosotros, no hablábamos de sexo…pero un día todo eso cambio y la verdad que coooomo cambió!!! Había tenido un día complicado, largo y cansador, lo único que quería era llegar a mi casa, tomar una ducha, recorrer mi cuerpo e ir a descansar. Estando ya en la ducha me sentía caliente, deseosa y sentía como mi vagina se derretía por la sensación de un jugoso y carnoso pene erecto y grande, mientras me masturbaba estando en la ducha, por alguna razón no podía dejar de pensar en la persona que había conocido en línea. Una llamada me desconcentro de tan delicioso momento y Salí del baño.

Luego de terminar la llamada me percate que tenía un mensaje de esa persona saludándome y dándome las buenas noches, no sé por qué pero automáticamente respondí que no podía dormirme, que mi cuerpo está realmente caliente y deseaba que me haga suya, que estaba mojada y muy lujuriosa…un momento de incertidumbre me cubrió por completo ya que no respondió automáticamente, sino que tardo un poco, pero fue una de las mejores respuesta que pude tener…él me dijo:

-No puedo creer lo que me dices, la verdad yo hace varios días me siento igual y hoy estuve masturbándome pensando cómo se sentiría penetrarte y hacerlo apasionadamente contigo, deseo sentir tu cuerpo desnudo sobre el mío, saborear tus labios, tus pechos, tu vagina, penetrarte lentamente hasta llegar a lo más profundo de tu útero y movernos cada vez más rápido, haciéndote gemir de placer y acabar juntos ...