ÁNGELES O DEMONIOS: EL BALNEARIO
Fecha: 01/07/2019,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: rxxa4, Fuente: SexoSinTabues
... con la piel del hombre. - Mis bomboncitos, es hora de divertirnos. – dijo el hombre con una voz muy grave. Inmediatamente las niños se quitaron su traje de baño quedando desnudas frente al hombre. La niña menor era delgadita, de piel blanca con cabellos largos y rizados negros, de 1. 45 de estatura, con unas nalguitas redonditas y más blancas que el resto de su cuerpo y unos pechitos apenas en desarrollo; la mayor por su parte medía 1. 55, también de piel blanca, cabello rizado largo y color castaño, con un cuerpo de diosa, sus caderas ya bien formadas, un culo despampanante que al igual que la otra niña, quien era su hermanita, tenía más blanco que el resto de cuerpo, su pelvis ya se encontraba con una ligera pelusita, y sus senos parecían una mandarinas medianas, pero bien firmes, con unos pezones más oscuros que para entonces se encontraban ya erectos. Entonces, el hombre musculoso se quito la ropa por completo, dejando libre un animal de 30 centímetros de largo y muy gruesa apuntando hacia el techo. Las niñas se acercaron y comenzaron a lamer el monstruoso miembro del hombre, quien las miraba con una cara de lujuria. Sebastián estando escondido, comenzó a masturbarse, deleitándose con la escena. - Oooh, muy bien mis niñas… Así, así. – gemía el hombre. En un momento de descuido, Sebastián baja un pie, haciendo notar su presencia. El hombre aunque descubrió al joven profesor, no dijo palabra alguna, pues presentía que tenía los mismos gustos que él. Cinco minutos después, ...
... acelerando sus lamidas, la chica mayor hizo que el hombre disparara un chorro a la cara de ella, y evitando que se desperdiciaran los demás, lo metió a su boca y trago todos. - ¡No es justo Vanessa! ¡Yo también quería! – le recriminó la pequeña a su hermana mayor. - Tranquila Katia. – dijo el hombre. – No te preocupes, mi amigo que está detrás de aquella cortina tiene mucha leche que darte. Sebastián se sorprendió, pues sabía que el único a parte de ellos era él, y más al haber dado su ubicación exacta. - Amigo, sal de ahí y ven a disfrutar estos bomboncitos. – el hombre le hizo la invitación. No quedándole otra opción, Sebastián salió con su verga erecta y se puso al lado de ellos. - Hola mi nombre es Mateo y soy encargado de este lugar. - Hola mi nombre es Sebastián y soy profesor. – se presentó también. - Anda, dale a la niña lo que quiere. – dijo. Sin titubear la pequeña Katia, se lanzó sobre la verga de Sebastián, quien ya la esperaba, y se dedico a mamar con tranquilidad. - Eso pequeña. Chúpamelo bien. – dijo Sebastián, dándole ánimo a la niña. Mateo se acostó en el húmedo suelo boca arriba, seguido por Vanessa quien abriendo sus piernas se ensartó el miembro en su vagina, y bajando lentamente hacía que se perdiera dentro de ella. Un rato después de estar chupando la verga de Sebastián, la pequeño Katia recibió su premio, bebiéndose toda la leche de Sebastián, sin desperdiciar una sola gota. - ¡Aaaah Katia! ¡Siiii! – Bufaba Sebastián. Mientras tanto, Mateo y Vanessa ya ...