La Soledad de los LLanos (Capitulo 2)
Fecha: 02/07/2019,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Carlos Nagasaki, Fuente: CuentoRelatos
CAPITULO II
Un hombre de Respeto.
-buenas tardes Don Agapito-
-buenas tardes-
-pásele, pásele, ¿Que le servimos? -
-lo mismo de siempre Chema, una cerveza por favor-
-claro que sí, Don Agapito-
Eran las 7 de la tarde en laCantina San Miguel. La gente poco a poco llegaba al lugar, las jugadas de baraja comenzaron al momento de arribarDon Agapito Ramírez. El pueblo lo estimaba demasiado, no había día en queDon Agapito visitara la cantina y no fuera invitado una copa por uno de los presentes.
-muchas gracias Pancho-
- de nada Don Agapito, aquí estamos pa’[1] servirle-
El máximo placer en la vida deDon Agapitoera ser reconocido y querido enSan Miguel el Alto Jalisco así como sus alrededores. Su sonrisa al momento de estrechar su franca mano contrastaba con aquella mirada que parecía explicar un enorme vacío.Don Agapito Ramírez Guajardo era un hombre nacido el 12 de junio de 1882 enVentura de Santa Rosa, Apodaca Nuevo León. Desde niño mostró un gusto enorme por montar a caballo, lo cual marcaría su juventud al convertirse en un auténtico vaquero reconocido regionalmente. Su familia era de campo y siempre se dedicó al negocio de la ganadería. Agapito junto con su padre y hermanos hicieron enormes esfuerzos para comprar sus propias tierras. Diferentes Hacendados y los primeros empresarios neoleoneses poseían tierras para la agricultura y requerían los servicios de un amplio conocedor del campo; De esta manera contrataban a los hermanos Ramírez. Muy ...
... pronto se dio a conocer como un jinete muy respetado, y desde los 16 años hasta los 20 -en 1902- fue el responsable de arrear reces para un gran número de ganaderos. Sus rutas fueron a través de muchísimos ejidos, rancherías y pueblos tanto del Estado de Nuevo León como Tamaulipas y Coahuila. En diciembre del 1902, Agapito fue contratado por un restaurantero importante originario de Monterrey. La diferencia radicaba en que dicho empresario lo necesitaba de manera exclusiva. Después de pensarlo unos días, Agapito acepto la propuesta y se mudó para el rancho de su nuevo jefe. La Hacienda donde trabajaría se ubicaba en la Villa de Santiago Apóstol; Allí mismo en Nuevo León. Agapito se mostró contento de trabajar relativamente cerca de su casa, es decir, a unos 70 kilómetros de distancia. Era un trabajo que conocía perfectamente y estaba muy bien remunerado, por lo tanto, decidió ir tras su fortuna sin saber que el destino le cambiaría su vida para siempre.
***
Después de las fiestas decembrinas de 1902 y recibir el año entrante en familia, Agapito se presentó en la HaciendaEL MANZANAR en Villa de Santiago Nuevo León. Fue introducido de manera rápida ante todo el personal y familia del lugar, y fue aquí donde la vida le haría una de las peores jugadas. La quinta persona que le presentaron era la hija del empresario regiomontano. Acababa de cumplir 14 años, sus ojos azules penetraron la mirada de Agapito y su sonrisa tierna hizo un festín de las fantasías del nuevo capataz. El ...