Mi relación
Fecha: 17/07/2019,
Categorías:
Confesiones
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... hecho lo cual, sin que mediara palabra suya me bajé el pantalón y le exhibí mi miembro erecto, no tan grande como lo es ahora y con menos pelos en el pubis de los que tiene hoy. El se acercó, se sacó su miembro que estaba erecto y que ya había superado la niñez, y se declaró sorprendido por el tamaño del mío (era obvio, yo era mayor). Luego me propuso que midiéramos el tamaño de cada pene, de forma tal que él consiguió una cinta métrica de costura y él me lo midió a mí y yo se lo medí a él, cosa que hicimos para deleite de ambos.
Luego nos toqueteamos pero sin declarar que nos gustaba, sino más bien como un juego de curiosidad. Hubo un momento en que él quería tocarme y yo quería hacer lo mismo de forma tal que nos recostamos de manera opuesta y mientras él tenía mi pene en sus manos yo tenía el suyo en las mías, me sentí tentado y me llevé su pene a mi boca, él lo sintió y no sólo empujó su pene, sino que hizo lo mismo con el mío, fue un 69 delicioso.
No nos penetramos, no nos besamos, pero durante mucho tiempo nos hicimos sexo oral tanto en el pene como en las tetillas y todas las veces nos vinimos delicioso, luego él se retiró del colegio y no volvimos a vernos.”
Compartidas las anteriores confidencias, parte de nuestra vida sexual gira en torno de nuestras fantasías, le meto a mi marido mis dedos en la boca como si fueran un pene y luego los chupamos ambos como si lo compartiéramos, y él hace ejercicios para que su pecho crezca como si tuviera unas tetas de verdad que yo chupara.
Mi relación les parecerá rara, pero estoy segura (y así lo espero), que un día tendremos una relación con una mujer y otra con un hombre, y en ambos casos, cada uno gozará de lo que en su momento gozó, y cada uno de nosotros verá satisfecha su fantasía.