LA ÚNICA VEZ QUE ME DEPILÉ
Fecha: 30/08/2017,
Categorías:
Gays
Autor: richard kajagoo, Fuente: RelatosEróticos
LA ÚNICA VEZ QUE ME DEPILE
Hola, cuando tenía 25 años por una apuesta me tuve que depilar todo el cuerpo, no creí que viviría una experiencia muy excitante gracias a eso.
Ya tenía como 4 días después de haberme depilado. Amanecí medio calentón, no tenía pareja en ese momento. Yo soy bisexual y tenía mis parejas “oficiales” del sexo femenino y cuando tenía calentón de algo “diferente”, acudía a ciertos lugares donde sabía que podía ligar un buen machote. Esta vez no fue la excepción, decidí ir al viejo cine Colmena, en mezzanine. Ya pasaban las famosas funciones continuadas, de corrido de 10 de la mañana a 10 de la noche, 4 películas al hilo (Por lo que he escuchado todavía existe el cine y la famosas funciones continuadas, lástima yo ya no vivo en Lima hace años).
La cuestión es que, al entrar al cine, la rutina de siempre, primero al baño para estar tranquilo después en el cine, prender el cigarro de rigor, entrar y quedarse unos minutos en el pasadizo para acostumbrar los ojos a la oscuridad, divisar las siluetas y ver qué hay de interesante, luego de unos minutos ya adaptado a la oscuridad de la sala, caminé a mi sitio de costumbre: al fondo, a la izquierda donde están las 5 fila extras de asientos que están protegidas por el muro donde está el proyector del cine.
Llegué temprano, plan de 11 de la mañana, eran mis viejos tiempos de vago, la primera película ya estaba bien avanzada. Escogí un lugar en la última fila, a esa hora se divisaban pocas personas, unas ...
... 10, 12 pero diseminadas por toda la sala. Conforme iba avanzando la película poco a poco iban entrando un poco más de gente. Al empezar la segunda película ya se divisaba regular gente en la sala y es ahí cuando subió a la última fila un tipo de 1:80 de altura, corte tipo militar, grueso, se sentó a unos 4 asientos del mío. Yo lo observaba de reojo a ver como se comportaba. El tipo poco a poco conforme avanzaba la película y las escenas se ponían más candentes, se sobaba el paquete por sobre el pantalón. En una de esas me mira sin soltarse el paquete por encima del pantalón, yo lo miro y solo me sonrió y él me hace un ademán con la cabeza que me siente a su lado. Rápidamente sin hacerme de rogar ocupo el asiento del lado y poso mi mano sobre su paquete que se sentía gruesote. Sin pérdida de tiempo, desabrocho su pantalón y haciendo un lado el calzoncillo saco una verga hermosa, gruesa, durísima, de unos 20 cms, caliente. Me pide que se la chupe, no lo hago sufrir y me agacho a comerme semejante miembro, chupo con deleite, juego con mi lengua en su glande, le pongo toda mi experiencia en esa mamada. Él disfruta muchísimo a juzgar por los sonidos que emite y las ganas con las que me frota las manos en mi culo, todavía por encima del pantalón. Yo para hacérsela un poco más fácil, con una mano libre desabrocho mi pantalón y bajo el cierre. Él ve que tiene vía libre, así que sin nada que le impida mete las manos por debajo de mi pantalón y trusa, y se encuentra con mi culo que es ...