1. El ser amable me entregó una madura


    Fecha: 10/08/2019, Categorías: Incesto Autor: GR69, Fuente: CuentoRelatos

    Era mediodía y venia de regreso de la universidad camino a mi hogar, estaba agotado después de tener que haber despertado muy temprano y mi cansancio era notorio. Debía hacer un largo viaje que incluía el uso de bus y metro por más o menos de dos horas, lo único que alegraba un poco el trayecto lleno de gente era que por esas dos horas observaba disimuladamente a todo tipo de mujeres que utilizan el transporte público. Debo admitir que soy muy caliente y me la pasó mirando culos y tetas, especialmente a mujeres maduras, que son mi mayor debilidad y fantasía, intento hacerlo lo más disimuladamente posible y sin propasarme pero no pierde detalle de cada mujer madura que me llama la atención. Hasta ese punto jamás había podido cumplir mi fantasía de culearme a una mujer madura, no conocía a ninguna de manera cercana, tampoco soy el tipo más guapo para acercarme a una y ser bien aceptado, soy bastante regular y promedio por eso me sorprendió cuando la situación que describiré sucedió.
    
    Venía sentado en el metro, como siempre poniendo atención a alguna buena madura, hasta que divise algo que me cautivo. Una mujer madura que me daba la espalda, lo que llamo poderosamente mi atención fue su gran y escandaloso culo, apretado y a punto de reventar en unos ajustados jeans se encontraba el mejor culo que había visto, muy grande, de señora madura, pero se veía muy firme y respingado pese a la edad y su voluminoso tamaño. Quede hipnotizado y con cara de tonto mirando el abundante culo ...
    ... frente a mí, cuando pude quitarle la vista a ese monumento observe a la dueña de tan potente trasero. Era una madura de aspecto regular, tenía la contextura de una mujer madura pero aún conservaba unas notorias curvas, algo de panza pero al mirarla de lado pude notar unas tetas bastante grandes, atrapadas en una blusa, no tan grandes como su culo, pero sí bastante levantadas para su edad. Quede embobado con la madura hasta que note que llegue a mi estación, note que se agacho dejando su enorme culo en pompa y recogió varias bolsas que se veían muy pesadas, las levanto dejando escapar un quejido de molestia y procedió a bajar.
    
    Aproveche que bajo en mi estación para seguirla desde atrás y seguir mirándole el culo, caminaba bastante lento por el peso de las bolsas así que me mantenía a cierta distancia, el culo se lo movía de manera increíble al caminar, bamboleaba de un lado a otro atrapado en esos jeans. El movimiento de su culo ya me había provocado una erección y cada vez me ponía más caliente, nunca antes fui tan atrevido de seguir a una mujer solo para verle el trasero así que me sentía excitado y nervioso. Estábamos llegando a las escaleras para bajar cuando se da vuelta y me mira directo a la cara. La mire directamente bastante asustado, pensé que me había descubierto mirándole el culo y no sabía dónde meterme para salvarme del cabreo que me caería encima, pero para mí sorpresa me pidió amablemente que la ayudara con las bolsas porque estaban muy pesadas. Enseguida ...
«1234»