1. Graciela, la hermana de Juliana se pasó de curiosa y perdió


    Fecha: 17/08/2019, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... boca, y simplemente le ordeno, chupala!!! Ella abrió la boquita y haciendo un esfuerzo se comió la cabezota, claro que apenas le entraban unos pocos centímetros de tripa, pero se ve que algo había aprendido en algún lado, ya que con maestría, tomando mi pija desde el tronco, comenzó a mamarme la verga muy lindo, le daba pequeños mordizcos a la cabeza, me pajeaba fenomenal. Yo no salía de mi asombro como esta pibita de sólo 11 años mamaba tan bién. Entrando en sospechas le pregunto, como es que vos Inés sabés chuparla tan bién? Ella al principio no me contesta, vuelvo a insistir en mi pregunta y ella me responde que hace como seis meses que se la chupa a su padre, cada vez que mi tía tiene guardia en el hospital. Pero que mi pija es muy grande comparada con la de su padre. Que la pija de mi tío le entra casi toda en la boca. Le pregunto entonces, y te la metió ya en la conchita? Nooooo me responde, no se anima. A entonces te la metió por tu culito? No, tampoco. Me mete a veces un par de dedos y yo siento muchas cosquillas y me emociono mucho, a tal extremo que a veces parece que me orino, me queda toda la conchita babosa. Claro la "Colo" acababa cada vez que el padre la pajeaba. Yo ante estas revelaciones, estaba totalmente recaliente. Me arrodillé frente a ella, le saqué su pequeñño shorcito junto con sus calzones. En frente a mí quedó una vaginita sin pelos, apenas una pelusita rojiza, sus labios externos eran pequeños, su conchita estaba cerrada, pero se notaban ya sus ...
    ... jugos haciendo brillar los mismos. Le comencé a acariciar su conchita, le corrìa dedo entre sus labios menores, encontré su clítoris ya enervado, sin su casperuza. Cuando se lo toqué emitió un gemido y quiso cerrar sus piernas, no selo permití y metiendo mi cabeza entre las mismas, le dí una batida de lengua, que en cinco minutos la tenían loca, se retorcía toda, gemía y suspiraba, parecía una anguila de como se movía, yo meta lengua, ya después le iba desde la conchita hasta el agujerito del culo, rosadito, cerrado. Su conchita era una fuente de jugos, le chorreaban entre las piernas hasta que llegó a su primer orgasmo. Me acomodé mejor, puse sus piernitas sobre mis hombros y sosteniéndola por los tobillos le acerqué mi pija a su cuevita, muy cerrada, muy estrecha, pero estaba decidido a llevare ese día su virgo. Le apoyé la cabezota en sus pliegues y le pido que se habra la entrada a su concha para que mi pija encuentre su agujero. Ella totalmente caliente y expulsando jugos al por mayor, ni lo pensó y se abrió los labios mayores, y entonces apoyé el glande en la entrada y con un pequeño golpe de caderas, metí la cabeza en su caliente caverna. Entró la cabeza y quedó atorada, pegó un pequeño gritito, pero no se achicó, entonces como yo no hacía intentos de penetrarla más. la pendeja empujaba con su pelvis saliendo al encuentro de mi monstruo de un solo ojo. Mi badajo llegó hasta su himen, les cuento que ese túnel estaba pasado de temperatura, era realmente fuego y jugos, ...