Mi Hijo y sus Amigos
Fecha: 26/10/2019,
Categorías:
Sexo con Maduras
Tabú
Sexo en Grupo
Autor: AkuSokuZan, Fuente: xHamster
... no quería que pensaran que les aguaría la fiesta quedándome con ellos – podemos pedir unas pizzas para la cena y todo.Estuvieron de acuerdo con mi idea, cada uno de los chicos telefoneó a su casa avisando dónde estarían, yo me sentí muy aliviada, como madre estaba más tranquila sabiendo que mi hijo se quedaba en casa y a su vez me tranquilizaba la idea de no quedarme sola. Comimos las pizzas en cuanto llegaron, a ninguno le disgustó que yo cenara con ellos, de hecho parecían alegres. De vez en cuando escuché comentarios por lo bajo en los cuales los chicos me halagaban, le decían a Alexis cosas como “que buena es tu mamá”, “que linda está tu mamá”, etc. Yo me hacia la sorda pero esos comentarios me dibujaban una sonrisa en el rostro.Fabio, otro de los amigos de mi hijo, parecía que iba a quebrarse el cuello intentando mirar bajo mi vestido, que no era muy largo y mis estilizadas piernas se sentían libres. El muchacho estaba sentado frente a mí y como sólo había una mesita ratona entre nosotros, podía tener una buena visión de mis extremidades inferiores. Al principio me sentí un tanto incómoda, el chico disimulaba muy mal su comportamiento, pero me provocaba cierta ternura verlo intentar. Al contrario de Mauro, Fabio era un muchacho bajito, de hombros anchos y nariz de chimpancé, daba toda la apariencia de ser un poco lento, pero según Alexis era bastante listo. Si lo era no lo estaba demostrando en ese momento.Mi vestido era bastante suelto, con cualquier movimiento se ...
... ondeaba. Decidí darle una pequeña recompensa por sus esfuerzos y separé un poco las piernas, lo justo y necesario como para que sólo él pudiera ver mi ropa interior, pero lo suficiente como para q la notara con facilidad. Yo tenía puesta una bombacha blanca común y corriente, no era mucho lo que iba a ver, pero seguramente le gustaría. Estuve en esa posición durante unos segundos y cuando lo miré con el rabillo del ojo me sorprendí al notar un pequeño bulto sobresaliendo de su pantalón. Inmediatamente cerré las piernas, no quería provocarle una erección al chico. Me sentía avergonzada, yo una mujer grande haciéndole esas cosas a un chico de 18 años. De todas formas me sorprendió que el chico se excitara tanto con tan poco. Era como ver un bikini, a lo sumo.La cena terminó y yo me encargué de recoger las sobras y limpiar todo. Los chicos se fueron a la sala de estar donde se encontraba el televisor. Con mi marido nos habíamos encargado de construir un pequeño cine hogareño, teníamos un televisor moderno y de gran pantalla, un buen equipo de audio conectado a él y un gran sillón en el que entraban cuatro o cinco personas cómodamente. Además había otros dos sillones individuales, uno a cada lado del sillón mayor. Me despedí de ellos tan rápido como pude, no quería robarles más tiempo, me dirigí a mi cuarto quitándome las sandalias mientras caminaba y en cuanto cerré la puerta me quité el vestido. Me llevé una sorpresa al hacerlo, de pronto recordé que no vestía una simple bombacha ...