1. No te acuerdas de mí, verdad? Primera parte


    Fecha: 26/11/2019, Categorías: Gays Autor: zorracubanita, Fuente: SexoSinTabues

    ... sabía lo que hacía. La zona en la que estábamos era como de campo, por lo que habían muchos matorrales y árboles. Finalmente lo veo que se desvía del camino y entra en un matorral. Ahí supe que ya había parado de jugar. Me detuve un poco nervioso, dudando si entrar o no. Pero ya había llegado hasta allí… Entro siguiéndole los pasos y a pocos metros me lo encuentro. Estaba sin gafas, sin camisa, con los pantalones en la rodilla y la polla en la mano. En su cara se dibujaba esa sonrisa que ya había visto otras veces: yo era una puta y él lo sabía. Sabía que me había calentado en el autobús y ahora venía a por mi recompensa. Yo me acerqué lentamente. Ya sabía lo que ocurriría así que no quise demorarlo más: como una buena zorra me agaché y comencé a chuparle la polla. Era bastante grande (no sabría decir cuánto) y gorda. Comencé por la punta y le pasaba la lengua, como chupando un caramelo. Luego me la metí en la boca y el muy cabrón me tomó la cabeza e intentó meterla completa. Las lágrimas me salían, no me cabía. Pero el cabrón seguía usando mi boca a su antojo. Me la sacaba y me golpeaba la cara con la polla mientras me decía: - Así…, así puta. Te gusta, verdad? Sabía que eras una putica que le gustaba que le cogieran el culo. Yo no respondía, tenía su polla metida hasta el fondo. Me encantaba que me tratara como a una puta y el muy cabrón sabía cómo hacerlo. Me puso de pie, me dio la vuelta y me dejó con el culo al aire. Me mordió una nalga y yo solté un ay!! - Te gusta, ...
    ... verdad? - me decía con una voz dominante. Yo no respondía nada. Sabía lo que venía ahora y sabía que me iba a doler. Pero no podía hacer nada: estaba en el puto monte con un tipo que me trataba como a una puta y que me iba a romper el culo. Me lo había buscado… El cabrón me metió un dedo y yo solté un grito. Comenzó a moverlo dentro de mi culo y yo a jadear como una perra. Sentía su risa y podía ver su cara: lo estaba disfrutando. De repente saca el dedo, escupe en mi culo y comienza a introducir su polla. Mi culo no cedía, no estaba lo suficiente dilatado. Pero él me empujó hasta quedar casi en cuatro patas y comenzó violentamente a introducir la cabeza. Yo le decía: “para por favor” pero eran súplicas sin sentido. Después de un esfuerzo finalmente logró meterme la cabeza. Yo grité pero él me tapó la boca: - Tranquila, tranquila putica que ya casi está adentro. No era esto lo que querías? Un macho que te cogiera rico. Comenzó a darme despacito. Al principio sus embestidas eran suaves, pero una vez que mi culo se adaptó se volvió más violento. Me daba duro, y cada vez que me la metía me sacaba un ay!! Parecía disfrutarlo como un loco. Yo comenzaba a sentir placer con la situación así que empecé a masturbarme. El tipo era una bestia, me daba nalgadas y me cacheteaba, me metía sus dedos en la boca para que se los chupara diciéndome todo tipo de ofensas. Pero a mí no me importaba, yo quería más. Estuvo dándome un buen tiempo hasta que me anunció: me vengo puta!!! Toma la leche ...