1. Rocksound


    Fecha: 28/11/2019, Categorías: Masturbación Autor: queenofthorns, Fuente: xHamster

    Me costó un par de noches en vela decidirme a aceptar su invitación. Una cosa era mandar mensajitos por XHamster o por mail. Incluso habíamos hablado un par de veces por teléfono, pero joder, quedar en persona era harina de otro costal: ¿Y si piensa que soy rubia, alta, delgada, guapa y encima inteligente? Si yo sólo soy lo último. O eso creo. Bueno, sí, simpática. Y si me maquillo en plan alicatarme hasta las cejas hasta quedo mona. Pero vamos, de ahí a ser una sex symbol no es que haya un mundo de diferencia, no, es que hay varios planetas. Por la mañana, con las ojeras por el suelo y pensando que eso no había corrector que lo disimulara me decidí: A tomar por culo. Yo voy y me tomo una cerveza y escucho a la banda esa que hace tributo a Led Zeppelin. Si aquello no da para más, pues lo más que conseguiré es, aparte de darme la hostia del siglo, es pillar un puntillo etílico festivo, ponerle cara a un nick de XHamster con el que llevo hablando casi 5 años y el escarmiento de que la próxima vez que se me ocurra quedar con un tío que haya conocido en XHam, decirme a mí misma: déjate de gilipolleces, quédate en casa, hazte un té y lee un buen libro, locadelcoño, que no se te ocurre nada bueno.Y en esas estábamos: Móvil en mano, escribiendo, borrando, volviendo a escribir,... borrando de nuevo para terminar con una frase que desde luego no pasará a los anales de la historia de la literatura: Nos vemos en Rocksound el viernes sobre las 21. Pulsar “enviar” y pensar: No aprendes, ...
    ... Queen, va a ser un bluff histórico. Seguro que ni se presenta.Y la semana que es así de puta fue pasando los días laborales como pasa los del fin de semana, a toda pastilla. Y el viernes llegó. Ni qué decir durante esos días había vaciado el armario en dos ocasiones buscando ropa para la ocasión: Esto no, que me queda como el culo. Esto... joder, ni me cabe. La secadora, que encoge la ropa, cabrona. Al final, después de mucho probar, las opciones quedaron reducidas a una minifalda, una camiseta de tirantes fresquita (porque pensaba en el concierto, con mogollón de gente y sudando como un pollo justo al lado de un tipo que me ponía un montón y yo con el sobaquillo al que ya había abandonado el desodorante y oliendo a avecrem). En la ropa interior ya me esmeré un poco más. No porque pensara que aquella noche iba yo a triunfar, sino porque me gusta la lencería. Ya que por fuera soy la mujer menos femenina sobre la faz de la tierra, al menos que mi coño vaya bien vestido con encajes y puntillitas... Así que escogí un conjunto negro, que no era lo más sexy que había en mi cajón de la ropa interior, porque me repetía una y otra vez que aquella cita no iba a pasar de escuchar a una banda mediocre, tomar un par de cervezas y poco más. Pero oye, que mi chochete sea el mejor vestido de la noche.Y ahí estaba yo plantada, en la puerta de Rocksound, maquillada como si hubiera usado la escopeta de maquillaje de Homer Simpson, lista para entrar y encontrarme con él. Eso de las mariposas en ...
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