1. Bajo la ducha tibia


    Fecha: 02/12/2019, Categorías: Sexo con Maduras Hardcore, Tabú Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    El agua se deslizaba caliente por mi piel dándole un tono rojizo. El vapor envolvía la ducha y junto a la luz de las velas hacía que mi mente se relajase poco a poco. La espuma del jabón se escurría sobre mi cuerpo desnudo, empujada por el agua.En mi mente se repetían las escenas que horas antes habían surgido sin esperarlo, recordaba las manos de mi amante acariciando mis piernas, haciendo círculos con el dedo detrás de las rodillas, las frescas sábanas rozaban la piel de mi espalda mientras esas manos expertas presionaban mis muslos y subían ardientes y resbaladizas por el aceite de almendras.Casi sin darme cuenta empecé a notar como mi concha se iba humedeciendo; podía imaginar sus manos apretando mis nalgas Por un momento pensé que hacía tiempo que no sentía un placer tan inesperado y descontrolado…De repente sus manos empezaron a presionar mis glúteos como me lo estaba imaginando y mi vulva humedecida comenzó a inflamarse entre mis piernas; sus manos se deslizaron entre ellas como si hubiese notado mi deseo silencioso y comenzaron a acariciar los labios vaginales suaves y recién depilados.Fueron adentrándose ávidos de provocar esos espasmos que tanto le gustaba observar. Entonces apreté mis muslos, hundiendo su mano todo lo que pude dentro de mi concha.Mientras estaba absorta en saborear el placer que me provocaban sus dedos dibujando espirales dentro de mi cuerpo, sentí que sus dientes se hundían en una de mis nalgas.Sacó los dedos de mi interior, me tomó por las ...
    ... caderas y me obligó a levantarlas, quedando de rodillas delante de él, expuesta como estaba. Abierta a él empecé a mojarme más todavía…Esa situación me podía, me excitaba. Me sentía totalmente sumisa ante él. Yo, la mujer dominante. Yo, la que le marcaba el ritmo a todo el mundo, la mujer que no soportaba una negación por respuesta.Oí el ruido de la bragueta y la hebilla de sus pantalones golpeando el suelo. Intenté girar pero él ya se había colocado detrás de mí y apretaba con una mano mi espalda, aprisionando mi pecho contra el sofá. Noté su verga tiesa buscando mi labia y enseguida, una tremenda penetración me hizo estremecer y delirar de placer.Quise debatirme, gritar; pero a medida que me cogía de esa manera tan dominante, me sentía totalmente a su merced, entregada y abatida. Una marea de violentas embestidas entraba y salía de mi cuerpo…De repente noté un líquido frío en mi apretada entrada anal y su dedo moviéndose en círculos penetrándome poco a poco. Los movimientos se iban haciendo más rápidos y furiosos, tanto con su verga como con su dedo. En un momento me sentía penetrada por los dos orificios a la vez, haciendo que me estremeciera como nunca me había sucedido.Cuando ya pensaba que no podía aguantar más, se salió de mí y puso su verga en mi boca. Me sentía tan sucia, pero tan viva… Absorbí mi sabor mezclado con el suyo, deslicé mi lengua por ese magnífico tallo erecto y acaricié sus glúteos, mientras él me hundía su pija en mi boca lo más hondo posible.Al sentir que ...
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