La nueva vecina
Fecha: 14/09/2017,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: dulces.placeres, Fuente: CuentoRelatos
... mujer, sus operaciones, sus amores, poco a poco mis lágrimas se secaron y las risas llegaron, fuimos cómplices en una incipiente borrachera.
Se había hecho tarde y estaba tan necesitada de afecto que le pedí si por esa noche, solo por esa noche podía dormir bajo el mismo techo, ella se rio, me dijo que todo estaba bien, ‘noche de amigas’ dijo…
Pasé al baño mientras ella acomodaba la cama, luego fue su turno, estaba ya con un camisón semitransparente que llegaba a sus tobillos, por el que se dibujaba una tanga negra y a la vez notaba sus grandes pechos ya desnudos, se me hizo muy sexi, solo me quedé raramente embobada…
Dejó la puerta del baño semiabierta y escuché nítidamente como orinaba de pie, claro, recordé que tenía pene… que tonta…
Y fuimos a la pequeña cama, al menos para dos, saqué mi sostén por debajo de la remera ajustada que traía y también mi short, ella por su lado dejó caer ese sexi camisón y por primera vez contemplé su cuerpo casi desnudo, sentí una absurda envidia por la perfección y femineidad de su cuerpo…
Apagó las luces, me sentí ciega en la negrura del cuarto, me acosté de lado, ella se pegó a mí por detrás, fue raro, pero su figura se adhirió a la mía formando una sola, sentí sus enormes pechos en mi espalda, su respiración pausada en mi nuca, me sentí excitada…
-Abrazame amiga…
Le dije susurrando, dejándole notar entre líneas algo más, pero ella solo me rodeó con su brazo libre, busqué algo más, discretamente tomé su mano y la ...
... llevé sobre mis pechos, recordé que Lulu aún tenía algo de hombre y empujé con mi culo hacia atrás, buscando sentir ‘eso’…
Ella me dijo pausadamente
-Flavia, no juegues… lo mío son los chicos… pero podemos terminar mal…
Cerré los ojos, solo respondí con mi mano, llevándola entre sus piernas, buscando eso que se escondía bajo la tanga, Lulu comenzó a besar suavemente mi nuca, a acariciar mis cabellos, a mordisquearme la oreja, pasé la mano bajo la tanga y palpé su verga un tanto dormida, pero rápidamente respondió a mi estimulación, se hizo grande, y más grande
-Me estoy mojando…
Le dije para que terminara de calentarse, ella levantó mi remera, su mano entonces acarició directamente mis pechos desnudos y pude sentir la dureza de los suyos refregándose en mi espalda, empujé más con mi culo, ella me giró y me puso boca abajo, terminó por desnudarme y me dijo
-Te voy a dar unos rico masajes, sabes que se dar masajes?
Me dejé llevar, Lulu pareció cabalgarme, la sentí tantear en la oscuridad, percibí que abría un frasco, o un pote, una fragancia exquisita llenó de repente el cuarto, y un tibio aceite llegó a mi espalda, exhalé el aire con fuerza, como vaciando ms pulmones, las yemas de sus dedos y las palmas de sus manos comenzaron a hacer su trabajo, que rico se sentía! mis hombros, mi espalda, mi cintura, su bulto pegado a mi trasero, que rico! solo me inundaba en un mar de placer…
Lulu dejó caer aceite nuevamente, ahora sobre mis grandes nalgas…
Pero los ...