1. Sexo con una madura, mi abuela


    Fecha: 28/12/2019, Categorías: Infidelidad Autor: Erospopuli, Fuente: CuentoRelatos

    ... durante el resto de su vida, tan larga que al absorberla le llegaba hasta la garganta. Todo el jugo de su raja olorosa y perfumada con caldos chochiles le inundó la boca. Su abuela puso su mano derecha en su nuca y le estrellaba la cara hacia esa selva roja y carnuda que vibraba con la lengua de Juan.
    
    Cuando al fin la viejita explotó, su nieto se secó la cara con la mano, esperando que ella le mandara a su cuarto con algún improperio. Pero todo lo contrario, le hizo sentar en la cama, se arrodilló ante su durísima verga, la cual parecía un tizón encendido, y se la metió completa en la boca, mientras decía algo así como "tadfacoitadvedgó". Lo dijo varias veces. Juán pidió con un hilo de voz a su abuela que se explicara.
    
    Ella se sacó el plátano de la boca y dijo:
    
    -Tan flaco y tan vergón, carajo.
    
    La abuela siguió chupando con mucha furia, con fuerza, con boca y garganta hambrientas. Juan creyó que ella se tragaría su picha y hasta sintió que iba a votar toda su leche en su garganta, pero no fue así. La vieja se levantó, gorda, caliente y en pelotas le tumbó a lo largo en la cama y con una agilidad, que dá el deseo, pero inconcebible para su edad, se sentó sobre su polla, y Juan sintió como su espada corría dentro de ella, estrellándose sobre una cosa dura que ella tenía dentro del chumino. La vieja abuelita subía y bajaba con tanta fuerza que Juan empezó a respirar duro sintiendo que se venía, pero no fue así: su abuela detuvo el ritmo y con la mano derecha le ...
    ... dio una vuelta brusca a sus bolas impidiendo que eyaculara.
    
    Luego se bajó jadeante y sudando, y de inmediato se puso en cuatro patas, ofreciéndole su ano rojo, arrugado y provocativo. No fue difícil meterle la verga, aquel ojete estaba sudado y como lubricado, la abuela lo mismo se había puesto crema o algo así. Aquel culo chupaba y apretaba su verga impidiendo su eyaculación.
    
    - Empuja cariño, empuja fuerte y procura no correrte, que así me darás más placer.
    
    Juan sintió como la cabeza de su cipote se metía en aquel estrecho agujero caliente, poco a poco el ojete de su abuela se abrió y él la penetró hasta los cojones. Se estremecía mientras las paredes esponjosas del culo de su abuela le agarraban hasta hacerle disfrutar como nunca. De pronto no pudo aguantarse y le dijo que se iba a correr. Entonces su abuela comenzó a gritar obscenidades.
    
    -Vamos, nietecito, dame duro que tu polla me encanta. Métamela duro, échame toda tu rica leche en el culo, duro, más duro, joderrrrrrrrr.
    
    Juán sacó su polla inmediatamente, mientras la gorda abuelita se tiraba varias pedos sonoros. Juan se moria de gusto mientras sentía el placer que salía de su verga. Unos grandes estremecimientos de su esperma barrieron el eje de su pene hasta ser arrojados en la vagina de su abuela. Se encorvó, eyaculó, se encorvó, eyaculó... La leche no dejaba de salir, lefa caliente saliendo a chorros que Juan echaba en medio de las flácidas y gordas nalgas de su abuela
    
    Poco a poco su pene se fue ...