1. Jennifer seduce a su padre


    Fecha: 12/01/2020, Categorías: Confesiones Autor: Quique., Fuente: CuentoRelatos

    ... la polla por encima del pantalón y notó que estaba empalmado. Siguió susurrando.
    
    -Déjate ir.
    
    -Vamos a arder en el infierno.
    
    Jennifer, al oír esas palabras, supo que ya lo tenía. Le quitó la polla, y antes de mamarla, le dijo:
    
    -No, papá, arderemos en mi habitación.
    
    Ricardo se dejó ir... Jennifer le hizo una pequeña mamada... Más tarde, volvió a besar a su padre, esta vez con lengua.
    
    Después de besarse con pasión, Jennifer se levantó, se dio la vuelta, y le dijo a su padre:
    
    -Bájame la cremallera, papá.
    
    Ricardo pensó que su hija se habría puesto una lencería sexy, probablemente de color rojo, pero a medida que bajaba la cremallera vio que no era así. Con la cremallera bajada, Jennifer, dejó caer el vestido sobre la alfombra. Se volvió a dar la vuelta. Ricardo vio a su hija cubierta sólo con oro y diamantes. Vio sus tetas, grandes, redondas y firmes, tenían grandes areolas rosadas y unos pezones inmensos. Sabía que su cintura era fina, pero nunca creyó que fuese tanto. Su pequeño coño estaba rodeado de vello rubio que parecía pelusilla. Sus caderas y su culo respingón pedían a gritos ser acariciados. Ricardo cogió a su hija por las nalgas, la atrajo hacia él y pasó su lengua por la almeja. La lengua era más grande que aquel pequeño coño. Jennifer comenzó a gemir. Después de darle un buen repaso... Jennifer se sentó en el regazo de su padre. El jugo de su coño puso perdido el pantalón gris del traje de Armani, y más que lo pondría al frotarlo contra la ...
    ... polla. Ricardo, mientras su hija se frotaba, le comía las tetas... Todo lo hacían con suma dulzura. A punto de correrse, le dijo Jennifer a su padre:
    
    -Vamos para mi habitación.
    
    Ricardo, caminando detrás de Jennifer, le miraba el culo respingón, y recordó: "P.D. Me encantó follar mi culo por primera vez". La polla le latía una cosa mala. Ya no pensaba que era su hija. Era la mujer más hermosa y más sexy de la tierra. Al llegar a la habitación, Jennifer se echó boca arriba sobre la cama. Brillaban los diamantes sobre su cuerpo y brillaban sus ojos verdes... Ricardo se desnudó en un santiamén. Se echó al lado de su hija. La besó mientras acariciaba sus tetas, luego le chupó y le lamió tetas y pezones. Recorrió cada centímetro de aquellas deliciosas tetas, luego bajó besando y lamiendo su vientre y su ombligo, besó el interior de sus muslos, y al final del camino, volvió a lamer su pequeño coño... Jennifer se iba a correr como una bendita, y se lo hizo saber a su padre.
    
    -Estoy a punto, papá.
    
    -¿Quieres correrte así o de otra manera?
    
    -Así. Después penétrame que soy multiorgásmica.
    
    -¿Tomas anticonceptivos?
    
    -Sí, no te preocupes por nada.
    
    Ricardo, se olvidó de la dulzura. Le devoró el coño a su hija... Jennifer se deshacía en gemidos. De repente se hizo el silencio, arqueó su cuerpo, soltó un chorro de flujo, y otro, y otro, y otro y otro, y volvieron los gemidos, más fuertes y más sensuales. Apenas acabara de correrse, Ricardo, que como he dicho se olvidara de la ...