1. Aventuras y líos de empresa


    Fecha: 23/01/2020, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Peterpan69es, Fuente: CuentoRelatos

    ... cinta en el pelo.
    
    Mientras estábamos bebiendo esa última cerveza, empezó el típico dialogo en el que se empiezan a mezclar las tonterías con las provocaciones y empiezan a salir comentarios sobre chicos, chicas, sexo…
    
    Llegó un momento en que pen, ahora o nunca y le comenté:
    
    Yo: me ha dicho Mario que tus besos son espectaculares
    
    Elvira: ¿te crees todo lo que te dicen tus amigos?
    
    Yo: no tengo por qué no creérmelo. Él siempre me ha contado la verdad
    
    Elvira: ¿y te quedas con su opinión solamente?
    
    Yo: lo mejor sería comprobarlo, pero ahí no entro solamente yo, tu tendrás algo que decir, ¿no?
    
    Elvira: está claro que si te beso podrás ver si te dice realmente la verdad, pero igual te defrauda y tú no piensas igual
    
    Yo: eso sí que no puedo decidirlo sin besarte…
    
    Y en ese momento acerque mi boca a sus labios y nos fundimos en un apasionado beso que mezclaba atracción y deseo, ya que los dos nos habíamos calentado con nuestras conversaciones y con ese último diálogo. Nuestras lenguas empezaron a mezclarse y a jugar y empezamos con leves mordisquitos en los labios, yo en los suyos y ella en los míos.
    
    Estuvimos así unos minutos y mis manos empezaron a inquietarse y a buscar una de sus piernas. Mientras la besaba, acariciaba su piel y estaba muy cerquita de tocar ya sus braguitas cuando freno mi acoso con una de sus manos y me la situó en su barriga… "sigue por aquí de momento…" me dijo.
    
    Acaricié su barriguita y subí por debajo de ese top hasta llegar a ...
    ... uno de sus pechos que empecé a amasar suavemente. Era duro y su pezón estaba a punto de reventar. Eso lo vi cuando con mis dedos empecé a pellizcarlo suavemente y fue cuando ella entre beso y beso empezó a gemir suavemente y a mostrarme su excitación.
    
    "vámonos de aquí…" le dije y asintió con su cabeza y me propuso ir a su apartamento ya que ella vivía sola.
    
    Llegamos después de un viaje intenso ya que en cada parada nos comíamos y nuestras manos tocaban todo lo que podían hasta que la luz verde nos hacía arrancar el auto. Ella llegó a sacar mi polla del pantalón y a pajearme levemente. Yo estaba a mil. Únicamente no me dejaba acercarme a sus braguitas, cosa que me tenía sorprendido.
    
    Ya en su apartamento los besos y manoseos fueron alocados y efusivos. La despojé de su top y por fin vi sus dos pechos lindos, duros y dignos de una veinteañera como ella. Le saqué la falda y ante mi tenía a Elvira en tanga y con todo su cuerpo para mis manos y mis labios. Le chupe las tetas y los pezones hasta el cansancio y sus gemidos aumentaban de volumen y pedían que siguiera haciendo eso que le encantaba. Me despojé de toda mi ropa y me quedé ante ella desnudo y con mi polla apuntando al techo y en ese momento, cuando le iba a desprender ese tanga me dijo:
    
    Elvira: tengo el periodo y no puedo tener sexo hoy. Lo siento
    
    Yo: tranquila. Lo dejamos para otro día, no pasa nada Elvira
    
    Elvira: que yo no pueda tener sexo no significa que tú te quedes así y tampoco tengas tu parte…
    
    Y ...