El intruso capitulo 10
Fecha: 25/01/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: adalberto1979, Fuente: SexoSinTabues
Capítulo 10 Era una casa nueva, había rentado a las afueras de la ciudad, era un suburbio de clase media, había una distancia considerable entre casa y casa, ahora tenía más libertad para hacer cosas con mis mujercitas, Toñito tenía su propia recámara lo mismo que Perlita, Lola dormía conmigo y algunas noches Perlita también y digo dormir, porque coger lo hacíamos todos los días los tres, sólo que a veces después de cogérmela ella se iba a su recámara y nos dejaba dormir solos y en otras ocasiones acababa tan cansada que se quedaba dormida en nuestra cama; Lola con el mayor amor del mundo le limpiaba el culo rebosante de mi leche y la arropaba para después abalanzarse sobre mí y matarme a besos y caricias. Con Carmen seguí escapándome por las mañanas, había cambiado mi horario de trabajo, entraba más tarde y salía un poco más tarde que de costumbre, de tal forma que Carmen era mía por las mañanas apenas Ramón salía a su trabajo y por las tardes cogía feliz con mis mujercitas, ellas no notaron el cambio de horario, por lo que no sospecharon. Ahora el cornudo era Ramón y no sólo eso, ahora el pagaba muchos de nuestros encuentros, a veces nos íbamos a almorzar Carmen y yo y ella nunca permitió que yo pagara, sacaba su bolsa y pagaba diciendo “es dinero de aquel”. Carmen hacía todo lo que le pedía, en una ocasión le dije que le hiciera un oral a Ramón, pero cuando sintiera que iba a terminar lo dejara sin acabar y que el solo se masturbara y ella se fuera a hacer sus quehaceres, ...
... fue muy divertido para mí ver cómo iba caminando tras Carmen señalándole su verga erecta, tambaleándose de un lado a otro y ella indiferente lo rechazaba y le hacía señas de que se masturbara el sólo y que la dejara en paz, el pobre Ramón tuvo que masturbarse en la sala aventando la leche a la alfombra, para colmo Carmen lo hiso limpiar su semen y el resignado lo tuvo que hacer; mientras él lo hacía Carmen miró al espejo y sus dientes me sonrieron cómplices de humillar al cornudo de Ramón. **** Eran cerca de las 10 de la noche, ya cada uno estaba en su recámara, esa noche Perlita se fue a dormir temprano, estaba cansada, llegando me había subido con ella a mi recámara y me la cogí por todos sus agujeros, Lola cómplice nuestra, entretuvo a Toñito en la sala y él ni cuenta se dio que no estábamos nosotros. Ahora estaba sólo con Lola quien en cuatro recibía mi verga por el culo, yo la sostenía del cabello y de una cadera, mi tórax estaba estático y sólo movía mi cadera de adelante a atrás, lo hacía de una forma muy candente, lo hacía rápido, solo mi cadera y el golpeteo de mi pubis con sus nalgas retumbaba en toda la habitación. Lola solo bufaba, tenía puesta una venda en los ojos y su pantaleta en su boca, así era últimamente nuestros encuentros, ella me decía que era mía y que yo podía hacer con ella lo que quisiera, experimentábamos todo, nos atraía cada vez más el bondage, la ataba a la cama y la cintareaba, lo hacía despacio, no quería lastimarla, solo le daba un poco para ...