Patas arriba (I, II, III)
Fecha: 04/02/2020,
Categorías:
Hetero
Autor: Anderson, Fuente: CuentoRelatos
... sea siquiera bisexual, así que creo que es otra cosa que tendré que callar.
Hoy es el primer día que voy a clases desde el accidente, que no se resolvió porque el coche era robado y lo encontraron abandonado en una carretera secundaria pocos días después de que me atropellasen.Mamochka me ayudó a subir al coche, pero vaya sorpresa nos llevamos cuando llegamos y vimos que Ricardo nos estaba esperando para llevarme al salón de clase. ¿He mencionado que además de lindo es tremendamente detallista? Es un gran chico y cada vez me gusta más, no sé qué haré, pero no creo que esto esté bien: me gusta un chico que jamás se fijará en mí porque él es tan hetero como yo homosexual, paradojas de la vida.
Ricardo
¿Cómo no iba a esperarlo a la entrada? Es su primer día desde el accidente y encima tiene que venir en esa condenada silla, si al menos pudiera caminar por su cuenta… pero no, el médico no quiere arriesgar nada, así que hala, a usar la sillita de las narices, bueno, al menos me encargaré de que su primer día no sea tan desastroso como podría ser.
Hay una cosa que me asusta: es cierto que con mis amigos suelo ser así de detallista, pero hay un yo-que-sé, un qué-se-yo, que me hace ser más dedicado con él, lo trato con el mismo cariño que he tenido con mis novias, puede que más, incluso, pero no tiene sentido, no es una chica, no puede ser, es antinatural, es malo.
Toda esa mañana fui su chófer y le llevé a todo sitio, incluso al baño, mis colegas estaban flipando, ...
... yo no soy tan exageradamente cuidadoso con nadie, pero qué le voy a hacer, me nace hacerlo y es de esos impulsos que es mejor no refrenar.
Me asombró cuando al terminar las clases me dijo que su madre le había puesto un SMS que no le podrían ir a recoger, lo que significaría que tendría que coger un taxi, pero que antes quería hablar con don Dani, como yo también quería pedirle consejo sobre lo que estoy sintiendo, estuve de acuerdo, pero le dije que yo también quería hablar con el tutor y que, si tendría problema esperándome, pero él estuvo de acuerdo, incluso Iván me pidió que hablara primero con el profesor.
- Don Dani, ¿puedo pasar?
- Claro, Ricardo, pasa. ¿En qué puedo ayudarte? No es común verte aquí.
- Lamento eso, profesor, sé que debería aplicarme más, pero esta vez vengo por algo personal, usted nos ha dicho que siempre al menos nos escuchará, así que he venido a pedirle consejo, aunque si está muy ocupado… -estaba nervioso y eso es todavía más raro en mí, así que don Dani me miraba sorprendido.
- Tranquilo, lo que estaba haciendo puede esperar, realmente lo que me dices me intriga mucho, nunca habías venido a verme y ahora me dices que es algo que necesitas decir en voz alta, pues adelante, no te cortes y si te puedo dar algún consejo, cuando termines de hablar te lo diré.
- Gracias, don Dani, es algo sencillo, pero a mí se me hace un mundo: estoy confundido, creo que me gusta alguien, pero nunca me había fijado en esa persona y me parece que está ...