1. Embriagado de amor por mamá.


    Fecha: 05/02/2020, Categorías: Incesto Autor: Crusnik, Fuente: SexoSinTabues

    ... que parara, pero seguía gimiendo. Por lo que seguí bombeando en la improvisada posición del perrito. Cuando sentí que me iba a correr terminé sobre su espalda, manchando su camisón. Mi madre estaba agitada. No podía creer lo que había hecho. Lo que no sabía era que solo sería el comienzo. Mi morbo era que se convirtiera en una adicta de mi polla. De nuevo continué con otra arremetida. La puse boca arriba y le abrí las piernas sosteniéndola de los tobillos. El fuego de sus ojos por la pasión indicaba que le gustaba. - Mami, te amo tanto. Quiero que seas feliz, quiero hacerte feliz. ¿Te gusta mi polla? - Sí… ahhh… ess más grande que la de tu padre… ahhhh…. ¡Qué buena polla! ¡Dame más hijo! ¡Dame más! - Mamita linda, quiero terminar en tu cara. - No está bien hijo, pero te amo tanto… Mami es tuya para que hagas lo que quieras con ella. Le di unas arremetidas más. Cuando sentí que me iba a correr me puse frente a ella y le pedí que me masturbara mientras le sobaba el clítoris. Me corrí en su cara. Mi mamá saboreaba el semen. Pero quería que ella ...
    ... también se corra. Me fui a su coño lamiendo y sobando su coño. Mi madre bufaba y resoplaba hasta que su respiración se normalizó. Al cabo de una hora me levanté y llené la tina con agua caliente. Dejé descansar a mi madre. La llevé a la tina somnolienta y desorientada. Le quité el sudor poniéndola en cuatro. Mientras la penetraba echaba champú y sobaba su cabello, jalándolo para quitarle el champú. Esta pasión se repitió por toda la semana. Con el paso de los días mi mamá se apuraba en llegar a casa rápido, apenas cerraba la puerta la desnudaba y comía de sus tetas arrinconándola contra la pared. Nos morreábamos en un pasional beso mientras con una mano le metía dos dedos en el coño y luego le clavaba mi pene en continuos mete-saca vertical hasta que me corría. Al salir las piernas de mi madre temblaban y no soportaban su peso, cayendo en cuclillas, saliendo el resto de semen de su coño. - Mami es toda tuya para que hagas lo que quieras con ella. Yo sonreí y supe que había logrado mi cometido y desde allí a ambos nos esperaba una nueva vida pasional. 
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