Novio en estado de coma -2
Fecha: 28/03/2020,
Categorías:
Sexo Oral
Autor: angel18, Fuente: CuentoRelatos
... rápido!”
“Je… Tenías una nena al lado y no un hombre por lo que parece”
Quiero crispar los puños pero no puedo. Quiero levantarme y golpearlo… pero no puedo…
“Hmmm… qué malo que sos… – dice ella más en tono de lamento que de enojo -. No te rías de los pobres”
“Jajaja… Es que las minas como vos necesitan hombres de verdad… hmm… me gusta cómo me estás tocando…”
“Y a mí me encanta tocarte… hmm… esa pija ya está para comérsela de vuelta”
“Je,je… sé que es lo que te gustaría, putita hermosa… pero vamos a lo que me habías pedido… ¿qué era?…”
“Hmmmmm… no me acuerdo, ja…”
“Querés que te refresque un poco la memoria?”
“Eehhmmm… cómo sería eso?”
“Primero vas a empezar por ponerte en cuatro patas sobre la cama”
Lo está diciendo, claro está, en tono de orden… Es absolutamente insolente hacia ella, hacia una mujer que tiene pareja y a quien le restaban pocos días para casarse, pero una vez más el tono de macho arrogante no pareciera a ella molestarle sino más bien todo lo contrario. La estructura metálica de la cama cruje, lo cual evidencia que se está produciendo movimiento y que, más que probablemente, ella está adoptando la posición que él le acaba de demandar. Las siguientes palabras del doctorcito lo confirman:
“Muy bien, putita, así me gusta verte… en cuatro patas como una perrita. A ver si ahora te acordás un poco mejor de lo que me dijiste… ¿qué era lo que querías?”
Él paladea y saborea el placer que la situación le provoca. Ella ríe:
“No ...
... sé – responde haciéndose la tonta -, sigo sin acordarme doctor…”
“Ajá… vamos a tener que recurrir a otro método para que te acuerdes… hay que profundizar el tratamiento… A ver, paciente, súbase la pollera y bájese la bombachita…”
Se escucha ruido de tela deslizándose; la muy puta está haciendo al pie de la palabra todo lo que él le dice sin considerarlo humillante ni degradante o bien, lo que es peor, disfrutando con esa degradación a que él la somete.
“¿Y ahora paciente? ¿Estando con el culito al aire se acuerda mejor?”
Liz no contesta; la respiración se le ha empezado a entrecortar y se la nota agitada; está claramente excitada por la situación.
“Quiero que me coja… doctor”
“Aaaah, mire usted, vamos recuperando la memoria, pero todavía no del todo por lo que parece… ¿Cómo hay que hacer el pedido? ¿Ya se olvidó de las formalidades?”
“Por favor, doctor… cójame”
“Ahora me gusta más, jeje… – la risita de él rezuma triunfo -. Pero lamentablemente no puedo porque me tengo que ir a ver a mi paciente…”
“¡Noooo! – le interrumpe ella prácticamente en un alarido; difícil es creer que no haya sido oído desde los pasillos -. Por favor… nooo… no te vayas Javier, no me dejes así…”
Ella suena desesperada…
“Pero tengo que irme paciente… Volveré más tarde…”
“¡Por favooor!” – implora ella en un tono terriblemente hiriente.
Se produce un instante de silencio.
“Está bien – concede él -. Creo que podemos hacer una excepción dado el estado desesperante en ...