vivo con mi abuela en la pequeña villa - Relatos Eróticos

vivo con mi abuela en la pequeña villa

... de viuda, pero cuando el destino te lleva a mi pueblo, y me entero que estas viviendo con ella, me vuelven las esperanzas de tenerte y comienzo mi via crucis, ante el dilema de amar a mi propio hijo. Sabes, fui alocada, casi hippie, pero me sentía degenerada deseándote como hombre, mama me aconsejaba pero era en vano, cuando me sentí mas tranquila le digo, mami porque no le dices que me visite y me dice sos bruja, el me propuso hacerlo el próximo fin de semana, no puede ser, te juro, surgió de él, es un milagro del cielo le decía. Y si fué un milagro, nuestro milagro de amor. Hijito vamos a desayunarnos, pero antes ponte la bata si no quieres perder mas de tu néctar, le digo perdámoslo mi amor y reiniciamos nuestro festin sexual. Hijo eres incansable, no mami mas incasable es mamita. Tomamos un desayuno por lo frugal y almuerzo por la hora. Nos duchamos y le digo donde iremos esta tarde, a la cama hijo a la cama, me parece el mejor y más entretenido lugar. Me pregunta tu tren sale a las 19, si, por?, porque pasaremos antes por mi local tengo que colocar este cartel, cual?, este, decía : “cerrado por vacaciones desde tal fecha a tal fecha”, un total de 16 dias, dos semanas con feriados, tomaras vacaciones? Si hijo y donde iras, donde nos lleve el tren de las 19. Mama!!, si hijo huyo contigo o mejor y mas romantico me raptas para violarme por todos lados, le digo también por el orto, dije por todos lados, o eres tonto. La abuela nos esperó con una mesa de fiesta y tres largas ...

... batas de raso, plateadas, una para cada uno nos dijo, para los postres, es ya tarde pero mañana iras al trabajo sin dormir hijo, debes ahora dejar satisfecha no a una sino a dos sátiras sedientas de sangre, de tu sangre, me entiendes. Sedientos y hambrientos ya que durante el dia muy poco habíamos comido, le barrimos la mesa a la abuela que fue la que mas bebió, dijo hijitos mios estoy con medio pedo pero ni piensen que se libraran de mi, para comer el postre que le hice, pongamosnos los disfraces que compre. Nos desnudamos y nos ponemos solo la bata, ahora mortales deberán adorar a este postre pára luego devorarlo con gusto y placer. Pensé la vieja se volvió loca. Trae una fuente larga con una replica exacta de mi morcilla, exagerada en el tamaño y con dos peras al vino tinto en un extremo simulando los huevos. Los señala y dice los cojones son solo para las damas, la cabeza para mi adorada hija y el rabo para todos, nada de quitarse la porciones y con cuchillo la corta, juro que hasta me dolio; esos cortes tan firmes que hacia, pura sugestion. Mama se abraza a ella y le dice vieja sos las puta y guarra de las madres y haces lo inaudito por tus hijos, y ambos la abrazamos se abre la bata y dice menos abrazos y mas tetas, y nos prendemos los dos a sus ubres. Asi comenzó una orgia donde en dos horas yo ya no tenia mas que dar y ellas como si nada, se tortilleaban como si nunca lo hubiesen hecho. A las siete entre las dos me llevan al baño, me hacen mear, me preguntan hara popo, ...