Mi obsesión fue un chico de 16 años, fui su perrita
Fecha: 10/04/2020,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... habitación, Nelson me iba alumbrando con una lámpara el camino, lo deposité en la cama y lo cubrí. Se me ocurrió decirle a Nelson si quería esperar a que viniera la electricidad, aquí o en mi recamara, sin pensarlo mucho, dijo que en mi recamara, sentí un poco de excitación que el chico me acompañara a mi cama, nos acostamos, incluso nos metimos entre la sabanas, charlamos un poco en la penumbra y poco a poco nos quedamos dormidos, al menos yo. Me despertó sentir un cuerpo junto al mio, era Nelson quien estaba atrás de mi, yo en posición de lado, sentí su paquete pegado a mi nalgas, sobre mis diminuto shortcito. Me fui poniendo cachonda y dejé que el experimentara conmigo. El empezó a restregar su pene contra mi trasero, luego sentí su mano sobre mi playera y sobre mi seno, sentí su aliento. Yo gemí para que supiera que no era ajena a todo esto. El entendió bastante bien porque comenzó a bajarme mi pequeño short, lo bajó hasta mis rodillas y luego lo hizo con mis pantys, luego el chico volvió a intentar con su pene y a restregarlo contra mi rajita, yo estaba que me moría de excitación, me estaba mojando en serio con este chico. Su pene estaba erecto y duro, lo podía sentir claramente entre mis labios vaginales, no era un pene de adolescente, era ya una verga de hombre!! Nelson siguió metiendo y sacando su verga entre los pliegues de mi raja, sin penetrarme. Yo no pude aguantar más y le abrí las piernas, el nuevamente entendió muy bien el mensaje, a los pocos segundos sentí ...
... el grosor de su verga, estaba caliente muy caliente, entrar en mi panocha, yo estaba tan mojada que él la deslizó sin mucho obstáculo, pude sentir su carne penetrar mi espacio más íntimo y al mismo tiempo debutarme como infiel, aunque en ese momento no lo pensé, gocé cada pulgada de su verga que me metió allí de lado en mi propia cama. Luego que la metió comenzó a moverse dentro de mi, yo no pude evitar gemir y quejarme gozando cada instante de la rica cogida que me daba. No era cosa del otro mundo su estilo, pero la fantasía, la situación de que era compañero de mi hijo, me ponía más cachonda y yo movía también mi pelvis para que me la metiera hasta lo más profundo de mi vagina. En eso yo vi que el chico estaba por llegar al punto de no retorno, entonces lo detuve y le dije - tranquilo chico, tranquilo!, despacio! Despacio!-, el nuevamente entendió y se detuvo para meter su mano entre mi playera y tocarme los senos, sin movernos. Yo me lenvanté la playera y el masajeo mejor mi seno y mi pezón poniendo le durito. Luego le dije que no se moviera que yo me movería, asi que comencé a mover mi pelvis, logrando también la penetración de su verga en mi rajita, sin que el hiciera nada, sentí como pedazo de carne dura se movía en el canal de mi vagina. Era sabroso y excitante, tanto que comencé a sentir como me embargaba un orgasmo, comencé a gemir descontroladamente y aceleré el mete-saca y me derrame, fue una tremenda corrida. Apenas terminé y me repuse, me voltee y me fui directo a ...