JUAN: Leyenda urbana 1 - Relatos Eróticos

JUAN: Leyenda urbana 1

... hacia sus madres. En el caso de Daniel ocurrió un día que al llegar a casa vio a su madre dándose tremendo faje con un hombre con el que salió en ese entonces, Silvina no escucho a su hijo entrar en su casa y estaba en la cocina subida en la mesa con las piernas abiertas y aquel hombre en medio de ellas tomándola con fuerza del culo y manoseándole los hermosos pechos, besándola como loco, su madre acariciaba su paquete sobre el pantalón. Jorge quedo impactado, espiando escondido detrás del muro asomando su cabeza mirando como su madre fajaba delicioso con ese tipo, cuando Jorge empezó a reaccionar noto que tenía ya una tremenda erección. La imagen que Jorge siempre había tenido de Silvina su madre, hasta ese día al menos, era la de una mujer normal, su madre, un ama de casa divorciada que se había dedicado completamente a su hijo. Para Daniel su madre nunca había representado algo sexual a pesar de ser tan hermosa con un cuerpazo de campeonato. Pero ese día el chico sintió una electricidad que lo recorría, fue como si de cierta forma hubiese perdido esa inocencia hacia su madre y por fin se dio cuenta que su madre era una mujer con necesidades, más aun al estar divorciada y no tener un hombre en casa. Claro que Silvina no era una cualquiera, no era de esas mujeres que van de putas por la vida acostándose con cuanto hombre puedan, pero cuando le llegaba la necesidad de un hombre no faltaba algún amiguito con quien pudiera satisfacerse. Silvi: Ya bebe, espetare que no tarda en ...

... llegar mi hijo. El hombre: Muñeca, me encantas, no me digas que no quieres pasarla bien? Silvi: Bebe sabes que sí, pero aquí no, ya te dije mi hijo ya va a llegar a la casa, anda ya vete y nos vemos en la tarde donde ya sabes… Al escuchar esas palabras Daniel, se alejó de inmediato de la escena dirigiéndose de prisa pero tratando de no hacer ruido a su cuarto, allí escucho como aquel hombre salía de la casa y su madre se despedía de él. Se tumbó en su cama, pensando en aquello, después de escuchar lo último que se dijeron su madre y el tipo aquel, supo de inmediato a que se referían, porque su madre lo vería en la tarde. El adolescente no se podía sacar de la mente la imagen de su madre siendo manoseada, fue entonces que comenzó a pensar lujuriosamente en Silvina. De una manera inexplicable desde ese día para Daniel su madre comenzó a volverse una obsesión, un objeto de deseo igual que su hermosa profesora madura Maribel, claro que al principio el chicho se sentía confundido no podía dejar de pensar en que era su propia madre, pero con el paso de los días esa misma idea lo excitaba aún más, hasta que finalmente aun sabiendo que era su propia madre, dejo de confundirse con esa idea. Con Jorge la situación era similar, aun teniendo en casa una mujer madura y espectacular como a él tanto le encantaban, nunca había pensado en otra forma sobre su madre. Más aún porque Marta era una mujer algo recatada, completamente enamorada de sus esposo y su hijo Jorge, a pesar de que su padre ...