1. Cuando era chica (parte 3)


    Fecha: 05/05/2020, Categorías: Incesto Autor: evloguer, Fuente: SexoSinTabues

    ... Me estaba durmiendo mientras los escuchaba hablar bajito, decían que deberían enseñarme cosas del sexo pq estaba creciendo y tendría curiosidad. Creo que sexo es cuando se hacen bebés, yo no quería tener hijos y me dormí desinteresada de esas cosas de mayores mientras a mi papi se le achicaba el pito liberándome la chuchita. Al despertarnos, mi papi me atendía solícito, me lavó bien la leche seca de mi cola y me puso bombachita nueva, yo estaba muy feliz y pude doblar la cabeza para ofrecerle un beso. Esperaba el paternal beso de siempre, pero mis labios se perdieron en su boca, me besaba como si fuese una mujer grande. Qué dulce ese beso largo, creo que ya me estaba iniciando en cosas de mayores con ese cariño. Su pipí estaba inflado y me lo acercó a la boca, ya podía mover la cabeza y besarle la puntita del palo carnoso. Abriendo mucho la boca logré meterme todo el glande mientras mi papi pedía que se la chupase. Aún no había desayunado y recordé que su lechita era alimenticia y curativa, entusiasmándome en chuparle fuerte el pito a mi padre. Cuando me largó los mocos sentía ahogarme, le salía más leche que la que lograba tragar y parte se me escapaba por la comisura de los labios. Transportada hasta la mesa, me sentó en sus piernas para darme de comer: parece que disfrutaba tener una bebita para cuidar nuevamente. Ya había olvidado los horrores del hospital, hasta sonar el timbre: era el enfermero que venía para una sesión de kinesiología. Casi no saludaron a mi mamita ...
    ... cuando se fue al empleo, estaban llevándome al dormitorio para hacerme la gimnasia curativa. Acostada me quitaron los zapatos haciéndome doblar las piernas una y otra vez, ¡ que cansador eso !! Creo que tenía la bombachita transpirada de tanta gimnasia cuando me sugirieron quitármela para no ensuciarla. Más que sugerencia eran ambos metiendo las manos bajo mi pollerita para quitarme la prenda íntima. Ahora al hacer la gimnasia se me vería el tajito pelado y ya no me gustaba, una nenita decente no anda mostrando sus lugares secretos. Mi padre para distraerme pasó a la cabecera y se puso a besarme, sí, besarme de verdad como una mujer grande. Creo que el enfermero se puso celoso y también me besaba las piernas, subiendo peligrosamente por debajo de mi vestidito y dándome escalofríos mientras pensaba que me vería la chuchita pelada. Espero que haya cerrado los ojos cuando me pasó la lengua por el tajito, me moría de vergüenza pensando que me miraba las partecitas privadas; mi mami había aconsejado que nunca me dejase ver allí. Mientras tenía sensaciones lindas no podía mirar hacia abajo, sentía que me estaban chupando la conchita pero mi padre me estaba comiendo la boca. Cuando el enfermero le preguntó a papi si podía meterme aunque sea la puntita, por suerte le respondió que su hijita era una nena inocente y no podría permitir esas perversiones. Con la mirada le dí permiso a mi papi para que el pobre enfermero pueda aliviar a su pajarito y refunfuñando le dio autorización para que ...