1. La primera vez que engaño a mi marido


    Fecha: 07/05/2020, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... culo para arriba, Pablo me empezó a besar las nalgas, me las abre y siento su lengua lamer mi ano. Fue una sensación que jamás había sentido, nunca nadie me lambio el culo, pero me gustaba, me gustaba mucho como Pablo me chupaba el ojete, yo daba patadas de placer en la cama a medida que Pablo me lambia las nalgas, el ojete, como me metía un dedo en el coño. Estaba tan cachonda que le pedía que meta de una vez su polla en mi culoboca. Pablo pone una almohada debajo de mi tripa, levantando mas mi culo, me dice que me abra las nalgas, siento como se acomoda sobre mí, «haaaaaaaaaaa», gemi fuerte y levanté mi cabeza cuando siento como su polla empezó a entrar en mi culo. «Haaaaa, haaaaaaaa», gemia a medida que Pablo me la iba metiendo por el ano, como me estaba rompiendo el ojete, hasta que di un gemido largo y fuerte cuando Pablo se acuesta sobre mi espalda y termina de meter toda su polla en mi culo. «Cariño, me haz roto el culo», le dije sintiendo dolor, que el ano me quemaba y su polla bien adentro de mi culo. «Te dije que tu pan dulce es una delicia», me dijo moviendo su polla para los costados dentro de mi culo, «si, ...
    ... y tú eres el primero que lo esta comiendo», le dije entre ayes de dolor y placer. La saca y me hace poner boca arriba, levantando bien mis piernas, sentí un poco de vergüenza cuando vi su polla sucia de sangre y cacaorina, pero se notaba que a él no le importaba, ya que así como estaba me la volvió a meter, haciendo que vuelva a gemir sintiendo su polla dentro de mi culo. Pablo me empezó a chupar los pies mientras sacaba y metía su polla por mi ojete. Pablo me estaba haciendo cosas que jamás nadie me habia echo, chupar mi ojete, follar mi culo, chupar mis pies mientras me folla. Estaba tan cachonda que hasta me orinaba de placer, no se cuantas veces me había corrido, Pablo me estaba matando de placer. Empezó a follarme fuerte, rapido, hasta que siento como me muerde los dedos de los pies gimiendo y corriendose dentro de mi culo. Le había metido los cuernos a mi marido, otro hombre que no fuese él me había roto el culo, pero estaba feliz de tanto que había disfrutado. Saca su polla de mi culo, se acuesta a mi lado, nos abrazamos, su polla estaba sucia y mi ano me palpitaba, nos miramos y nos besamos abrazados muy fuertes. 
«123»