(18-A) Los amores de Ana Etxeberría
Fecha: 12/05/2020,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Mister Neron, Fuente: CuentoRelatos
... concejalas y la secretaria murmuraron de placer contemplando el sexo oral en la cama.
-Tomad asiento y disfrutad –señaló Ana tres sillas acolchadas.
-Ahhhhhh, joder… -dio el primer grito el inspector Balaguer.
-Gabriela, puta, para ya que lo eyaculas.
-Lo siento –la sacó de la boca en estado de roca dura-. Cuando te corras con Ana te la mamo del todo –le susurró al oído del policía-. Todo tuyo, Ani.
-¿Claudia?
Claudia se colocó tras la cámara y se preparó.
-¿Todas en sus puestos? –preguntó Ana. El silencio fue un si general-. Se rueda. Cinco… y acción.
Ana hace acto de presencia y se arrimó al inspector Balaguer. Le quitó del todo los vaqueros y los boxers, los lanzó lejos y Gabriela se apoderó de la ropa. ¿El motivo? El móvil del inspector Balaguer. Se lo pasó a las concejalas y ellas a su secretaria que procedió a unas gestiones rápidas.
-Dilo –jugaba Ana.
-¿El qué? –se relamía el policía de placer.
-Que soy tu puta.
-¿Vas a seguir hablando o jodemos?
-Mmmm, eres hombre de polla hecha y derecha –le besó al mismo tiempo que se subía a sus muslos-. Te lo dije, que te follaría.
-¿Qué hace esa cámara ahí?
-Es para un proyecto visual. No te preocupes. Está apagada.
-Eres una puta mentirosa.
-Y te gusta. ¿A que sí?
-Quieres joder a Irene, ¿no?
-No, quiero joderte a ti –la agarró con la mano-… bufff está bien dura… toda para mí… ahí voy…
-¿Y el condón?
-Tranquilo, me he tomado tres antibabys –rio ella ...
... hermosa.
-¿Por qué eres tan hermosa?
-Porque soy la mejor, ¿no lo sabías? Te lo voy a demostrar –y bajó la cadera. Todo fue entrando poquito a poco, centímetro a centímetro-… bufff…
-Mmmmmm…
-Un poco más… así… ya…
-Qué putón eres…
-No te haces una idea… -empezó a girar la cadera de adelante atrás-. ¿Te gusta?
-Me encanta.
-Voy a dar el primer salto, ¿vale?
-Vale.
-¡Au!
-Otro.
-¡Ay!
-Dale otro.
-¡Joder!
-Más, quiero más.
-Contigo me siento una mujer completa… ¡au!
-Otro más.
-¡Ayy!
-Más alto.
-¡Coño! ¡Qué rabo me estoy metiendo! Me da pena Irene. Lo que se está perdiendo.
-Dale, dale más.
Los saltos de Ana cogieron el compás.
-Pégame –exigió Ana.
El policía lo hizo en su culo.
-Más fuerte.
El sonido del bofetón en la nalga fue escalofriante.
-¿Solo sabes hacer eso? Pegas como una maricona.
-Puta de mierda –soltó el brazo y la abofeteó en la cara.
-¡Ay! Eso me gusta más.
El sexo se transformó en saltos violentos y golpes salvajes.
-¡Venga, maricón! ¡Córreme!
-¡Para, Ani! ¡Me haces daño!
-¡Vamos, coño! ¡Transfiéreme tu crema genética!
-¡Me la vas a partir en dos!
-¡Ahhhhhhh, joder!
-¡Puta!
-¡Qué polvazo!
-¡Que pares, joder!
-¡Ahí viene ya! ¡Madre mía, y cómo viene!
-¡Ayyyy!
-Agárrate a mi culo… eso es… mírame a los ojos… así… uuuuuuuh, coño…
-Puta… -sollozaba el inspector.
-Ahí voy, poli duro… ¡¡¡Ahí voy!!!... AHÍ VOYYYYYYYYY…
-YA YA YA ...