1. Colegio de señoritas


    Fecha: 29/09/2017, Categorías: Dominación / BDSM Autor: axel, Fuente: CuentoRelatos

    Mi edad adolescente, y esa febril excitación erótica como contínua, hacía de mí un chico como enfermo por el deseo y el constante ardor.
    
    Modestia aparte, mi figurita estética siempre fue cosa por el femenino sexo siempre alabada. Desde niñito casi, las mujeres supieron poner sobre mí sus miradas con maliciosas maneras harto evidentes, y en ese marco creciendo, mis orientaciones fueron rápidamente girando hacia esa costumbre de gustarme mucho el hecho de exhibirme a ellas.
    
    Ya en mi pre-adolescencia, solía mostrarme completamente desnudo a amigas que aprovechando ésas mis inclinaciones, comenzaban a hacer de mí su objeto de prohibidas diversiones, manoseándome hasta el hartazgo así desnudo y arrancando de mí aquellos orgasmos que me hacían hasta gritar desesperado de placer para mayor goce de ellas que se regodeaban así haciéndome estallar cada vez que caía yo "en sus garras".
    
    Fuí creciendo, y lejos de amainar lo mío, pues...se intensificaba aún más.
    
    Cierta vez, haciendo un mandado a una zona de la ciudad totalmente apartada y contigua a un inmenso bosque, conocí una solitaria edificación tipo palacio antiguo, del que ví entonces en el momento en que por allí pasaba, salían de él hermosísimas muchachas de colegial uniforme. Aquéllo, había resultado ser un colegio femenino, y pude ver cómo varias de ellas, se dirigían hasta un lugar en el cual allí esperaban a un ómnibus que las retornaría a sus lugares de orígen.
    
    El lugar, era absolutamente solitario y sin ...
    ... ningúna casa ni gente cerca, y, además, con el bosque ahí a escasos metros lindante.
    
    Mi excitación fue instantánea, y ya...mi deseo de exhibirme a aquellas chicas, fue inmediato.
    
    Sin haberme ellas hasta entonces advertido, rápidamente fuí por un lugar introduciéndome en el boscaje, para allí dentro desnudarme completamente desnudo, y dejando por allí escondidas mis ropas, comencé a caminar por entre los árboles a una distancia y lugar de donde ellas estaban esperando el ómnibus, de manera que pudieran todas verme.
    
    Una femenina exclamación inmediatamente surgió, cuando la primera en advertirme así me vió. Obviamente, a las otras de inmediato se lo comunicó, a lo que todas enseguida miraron, y ya, un coro de risitas y exclamaciones, comenzaron entre todas ellas ahí a brotar.
    
    Las carcajadas comenzaron a tronar estridentes, y yo continuaba mi caminar lento y como indiferente, dejándome así ver por todas ellas que no paraban de reír, reír y reír...
    
    Exprofesamente me internaba entre el boscaje, desapareciendo por momentos del campo visual de ellas que se movían tratando de localizarme . . .Yo, exprofesamente también, reaparecía dejándome nuevamente ver, y sus carcajadas estallaban entonces. Cuando advertí que el ómnibus que esperaban por allá iba apareciendo, me introduje rápidamente ocultándome más en el bosque, y pude ver que cuando el mismo llegaba...ellas...desistieron de ascender, dejándolo partir sin ellas marcharse. ¡Querían seguir mirando!!!
    
    El ómnibus allá se ...
«123»