1. Malena 4: Nuevo Comienzo 1


    Fecha: 18/05/2020, Categorías: Lesbianas Autor: relator23, Fuente: CuentoRelatos

    ... tomó de un solo trago su alimento que consistía en varios huevos crudos disueltos en vino y con otro ingrediente que Florencio se negó rotundamente a precisar a instancias de Malena.
    
    -bueno sigan, dijo Florencio recogiendo lo que estaba tirado por el piso, ¡ah! Viejo “macho cabrío”, acuérdate de hoy…
    
    -¿Cuánto tiempo me queda? Preguntó Azcunes.
    
    -son las cuatro de la mañana… una hora y media, diría yo. La jalea está en el baño… ¿quieres que te la traiga?
    
    -¿qué esperas para irte?
    
    -au revoir, dijo Florencio despidiéndose con una de sus elegantes piruetas semejantes a reverencias.
    
    Azcunes le hizo un mohín divertido a Malena indicándole que Florencio estaba loco y fue al baño por su jalea.
    
    -¿Cuánto tarda en hacer efecto?
    
    -no sé.
    
    -quiero mi cremita…
    
    -maldito viejo chismoso, dijo el profe mientras se dirigía a la salita exterior en busca de ella.
    
    -sólo un poquito le dijo, quiero que no te me pierdas…
    
    -¿poquita jalea también?
    
    -sí, casi nada. No quiero estar con una erección en la junta de la mañana.
    
    -cuando listo… avíseme. Mientras puede jugar con mis accesorios.
    
    -Malenita, te quiero hacer una pregunta… esperó un momento y se lanzó… ¿me darías tu colita?
    
    -No, fue la rápida y segura respuesta de Malena, ¡no! Y no.
    
    -y si te la compro…
    
    -Nanai, nanai… no me vas a convencer… ya la tengo negociada.
    
    -mentirosa…
    
    -es mentira, pero no te la voy a dar ni a vender…
    
    -ni por un carro…
    
    Malena titubeó. Lo pensó: Pero no. No. Nada de ...
    ... eso. Eso duele mucho y si me rompe debería ir a un hospital y así sí es verdad que se descubriría de una manera horrenda mi traición… ¿qué traición?... bueno: no es no.
    
    -ni por un carro, le dijo, ¡anda, déjate de eso!… quizá otro día…hazme cositas… ¿ah?
    
    Él se rio y con cara de buen perdedor. La tomó en sus brazos y empezó a chuparle los senos con un ritmo y una sabiduría que Malena se dio cuenta de que ninguno de sus antecesores sabía “un coño de mamar tetas”: ¡coño, papi, qué rico!
    
    Sus orgasmos empezaron de inmediato… él también estaba excitado y la penetró con fuerza. El pene resbaló por su consentidora caverna clavándose en lo más profundo… ella acusó el golpe en sus ovarios:
    
    -papi, ¿sientes mí útero? Le preguntó en broma mientras pudo estar concentrada en otra cosa diferente a lo que le estaba haciendo sentir su inquilino vaginal.
    
    Lo mismo que antes, no acababa. Pero ahora no se desesperaba, sólo chillaba improperios que él contestaba con carcajadas. Se vino en su interior pero no perdió el ritmo.
    
    Ella lo insultó: eres un maldito traidor, te vienes y no me esperas... ¡me vas a matar!… ¡cógeme papi!... ¡Así, así, así!... ¡Dame duro, duro!
    
    Sus piernas estaban rodeando la espalda del profe, quien se movía a una buena velocidad. Ella sudaba y orinaba… él le daba con todo lo que le quedaba. Ella no llegaba.
    
    El seguía y seguía… ya casi desfallecía… ella gritó y le clavó los dedos en la espalda, subió la cadera todo lo que pudo, abrió los ojos y no pudo ...